El alcalde de Roa de Duero, David Colinas, se reunió ayer con el subdelegado del Gobierno en Burgos, Pedro de la Fuente, y el jefe de la Comandancia de la Guardia Civil, para empezar a gestionar los trámites para colocar cámaras de seguridad para controlar las calles de la villa. Tras revisar los condicionantes y el reglamento legal, el primer edil apuntó que «lo más sencillo es colocar cámaras relacionadas con el control del tráfico, que se podrían poner en las entradas por carretera, porque las que queremos poner dentro del pueblo es más complicado por la actual normativa».
Con esa base, de la reunión informativa con De la Fuente, Colinas extrajo que la situación que se ha vivido en las calles de Roa las dos semanas anteriores, con cuatro robos en establecimientos hosteleros, «no es una incidencia alarmante comparada con el año 2023, en el que se registraron 16 robos». Aun así, desde el Ayuntamiento raudense se pretende hacer un llamamiento a todos los bares y restaurantes para que pongan en práctica medidas como la retirada de la recaudación diaria de las máquinas tragaperras para intentar disuadir a los amigos de lo ajeno a que repitan robos similares en fechas futuras.