El HUBU reactivará el plan de choque frente a las listas de espera quirúrgicas y, si la Gerencia Regional de Salud (Sacyl) da el visto bueno, la intención es que se vuelva a operar por la tarde mediante peonadas a pacientes en lista de espera de cinco servicios diferentes: Cirugía General, Angiología y Cirugía Vascular, Urología, Otorrinolaringología y Oftalmología. La principal traba radica en el personal disponible para ello, ya que a finales de enero se acaban numerosos contratos de enfermería y todavía no se ha especificado cuántas renovaciones y/o nuevas incorporaciones habrá.
La Consejería de Sanidad aprobó a finales de diciembre la prórroga de las «medidas especiales sanitarias de ámbito asistencial para la mejora de la accesibilidad y la disminución de las listas de espera en el ámbito de la atención primaria y la atención hospitalaria» con intención de mantenerlas hasta, por lo menos, el próximo 31 de marzo. A partir de ahí se valorará si los hospitales y los centros de salud tienen capacidad para asumir con sus propios recursos las listas de espera o si es necesario prolongar las peonadas.
Este mecanismo extraordinario consiste en que los profesionales que lo deseen trabajan varias horas después de su jornada ordinaria para sacar adelante un número determinado y fijo de procedimientos. Por ese tiempo cobran una cantidad concreta en la nómina, en concepto de productividad.
Técnicamente se denomina autoconcertación y en el HUBUse ha aplicado a lo largo del último año y medio casi de forma ininterrumpida. Se activó en el verano del 2022, con la intención de encauzar unas listas de espera que en el HUBU ya eran elevadas antes de la pandemia, pero que la crisis sanitaria desbocó hasta las 7.332 personas pendientes de cirugía en la capital, a finales de marzo del 2022. Así, la Consejería de Sanidad optó por recuperar las peonadas en los servicios con mayores demoras, siempre que haya suficientes voluntarios para hacerlas.
En el HUBU ha habido pocas variaciones en los servicios con peonadas, ya que en Cirugía General, Oftalmología y Otorrinolaringología se aplican desde el principio y, en general, sin apenas interrupción. Urología empezó más tarde para operar a pacientes en lista de espera por patología no oncológica, pero no las ha mantenido de forma continuada por problemas de personal, entre otras cosas. En Cirugía Vascular se han hecho de forma más esporádica, pero es un mecanismo útil para procedimientos como las varices. El plan de choque se revisa periódicamente, en función de las necesidades.
A falta de datos actualizados, el HUBU tenía el pasado septiembre 4.991 cirugías pendientes.