El jefe del servicio de Extinción de Incendios ha presentado su dimisión poco más de un año después de asumir en el cargo. Los motivos esgrimidos por Eduardo Collado para dejar el mando de los Bomberos de la ciudad son personales pero sobre todo profesionales. Y es que los problemas que arrastra dicho Cuerpo desde hace años le han pasado factura. "Es un puesto ingrato y además ves que, por mucho que pelees, pasa el tiempo sin que se consigan cosas", asegura.
Sus principales demandas han sido la mejora de las instalaciones y la necesidad de aumentar la plantilla, ya que la escasez de efectivos obliga a meter horas extras y redoblar esfuerzos para cubrir todos los turnos con el personal mínimo para garantizar una intervención de calidad y segura. Sin embargo, no se ha avanzado mucho en los últimos tiempos para paliar la situación. Ahora mismo serían necesarias "nueve incorporaciones" para cubrir las plazas vacantes y las bajas.
Esta carencia impide además contar con mandos medios, y los que cumplen esas funciones están en muchos casos mediante comisión de servicios y no con plaza fija, lo que sobrecarga de tareas a la jefatura. "Al final te vas llenando de problemas y de preocupaciones que te llevas a casa", asegura Collado, que espera que su decisión suponga un impulso para que desde el Ayuntamiento se asuma que la situación en Bomberos empieza a ser insostenible y que hay que adoptar medidas de forma inmediata.
Aunque ya ha presentado su dimisión oficial, permanecerá al frente del parque hasta noviembre, fecha tope para que desde el equipo de gobierno se encuentre una solución. Collado, licenciado en Obras Públicas con más de una década de experiencia en el parque mirandés tras haber trabajado un tiempo en la vecina localidad de Haro, fue nombrado jefe del servicio tras la jubilación de Jesús Ángel Amo, quien estuvo más de tres décadas en el puesto. Desde el primer momento dejó claro que sus prioridades apuntaban a la mejora de las instalaciones, ya que construir un nuevo parque ahora mismo es inviable, y sobre todo el incremento de plantilla.
Su llegada coincidió con la incorporación de cinco compañeros pero desde entonces no se han producido más incorporaciones y eso repercute en la estructura interna. Sin ir más lejos recientemente se ha recurrido la convocatoria y bases para la provisión de un puesto de cabo. Durante el breve mandato de Collado se ha renovado al menos un camión de rescate en carretera ya que el anterior estaba obsoleto, pero el retraso en la firma del convenio con Diputación ha impedido que se pueda concretar la compra de un autobomba para reemplazar al actual, con más de veinte años de uso.