Es un proyecto impulsado por el Ayuntamiento de Burgos que, vaticina el concejal César Barriada, va a ser estratégico para el desarrollo turístico y que va a permitir que la ciudad dé "un importante salto cualitativo" en la digitalización, en la gestión inteligente del destino y la modernización de la oferta turística. El objetivo principal es transformar la forma en la que Burgos conecta con sus visitantes, transformar la forma en la que se gestiona la oferta turística y optimizar todos estos recursos.

Esta iniciativa está compuesta por cinco fases. La primera de ellas es la creación de una plataforma de turismo inteligente con base tecnológica, para la cual se estima una inversión aproximada de 600.000 euros. La segunda corresponde a la digitalización de la experiencia turística, para la cual la inversión destinada es de en torno a 350.000 euros. Para ello, se creará una aplicación turística inteligente con asistencia en tiempo real que llevará a cabo recomendaciones personalizadas para los turistas. La tercera fase consiste en la medición y análisis del impacto turístico, para la que se destinarán 250.000 euros. La cuarta se basa en el apoyo a empresas locales y promoción del turismo sostenible, que permitirá el desarrollo de herramientas digitales para las pymes y empresas turísticas. Se estima una inversión de 200.000 euros. Finalmente, la quinta corresponde a la gobernanza y a la sostenibilidad del proyecto, que estará dotado con 221.400 euros y cuyo objetivo será la implementación de un modelo de gestión y gobernanza para garantizar la operatividad del sistema a largo plazo.