Un grande herido

ROBERTO MENA
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El Sporting visitará El Plantío en un momento delicado, repleto de dudas, con una afición desesperada y echando cuentas para evitar el descenso

Djuka se pierde por lesión el partido del domingo en El Plantío. - Foto: @LaLiga

El Real Sporting es uno de los históricos del fútbol español que pelea por regresar a la elite. Cumple su sexta temporada consecutiva en Segunda División, que comenzó con la idea de luchar por el ascenso de la mano del Abelardo. Pero sus planes se han ido torciendo conforme ha avanzado el curso y, a falta de 11 choques, se encuentra echando cuentas para evitar complicaciones en el final de liga y con Miguel Ángel Ramírez en el banquillo tras la destitución del 'Pitu' después de 23 jornadas.

La campaña está siendo complicada para los rojiblancos y el actual momento puede ser uno de los más delicados. La derrota ante el Mirandés (3-4) fue la gota que colmó el vaso, ya que el partido del cuadro asturiano fue muy pobre sobre todo en tareas defensivas. La afición no solo carga contra el equipo y el cuerpo técnico, sino que se ha girado al palco para recriminar la labor del Grupo Orlegi, propietario de la entidad y liderado por al mexicano Alejandro Irarragorri.

El ambiente no es el mejor y eso se ha notado en el desplazamiento de la llamada 'mareona', la afición sportinguista. Si la pasada campaña fueron alrededor de 3.000 los rojiblancos que presenciaron el choque liguero en El Plantío, este domingo será cerca de un millar los que lleguen desde Gijón para animar a su equipo.

Precisamente uno de los peligros de la escuadra de El Molinón son sus apuradas circunstancias. Buscará con ahínco un cambio de rumbo, un punto de inflexión que, además de darle aire en la clasificación, le permita calmar a sus seguidores, con muchas dudas sobre el equipo.

Se trata de un combinado que no destaca como visitante y su última victoria a domicilio se remonta al 8 de diciembre de 2022 cuando se impuso en Lugo con Abelardo aún en el banquillo. Con Ramírez al frente, la escuadra gijonesa ha perdido los cuatro encuentros que ha disputado fuera de casa, un estadística que el Burgos confía en ampliar este domingo.

Sin Djuka. Además, las lesiones se están convirtiendo en un lastre para los rojiblancos. Esta misma semana se ha confirmado que Djuka, su referencia ofensiva y un jugador importante en ataque que había roto su sequía goleadora hace dos jornadas en Albacete, se perderá lo que resta de temporada por una lesión de rodilla que le obligará a pasar por el quirófano.

Uno de sus problemas está en la fase defensiva. Es un aspecto al que el conjunto sportinguista le ha tratado de poner solución, aunque no encuentra el camino. Ramírez apostó por jugar con tres centrales y dos carrileros, aunque en los tres últimos partidos ha pasado a defensa de cuatro. Después del descalabro ante el Mirandés no sería de extrañar que regresara a su idea inicial.

Sin Djuka, se han quedado sin referencia ofensiva y no parece que Milanovic, un jugador con características similares al montenegrino, vaya a ser el recambio. Todo indica que en Burgos el conjunto rojiblanco apostará por jugadores de ataque de más movilidad con Cristo en la punta y Aitor García, Queipo y Otero por detrás de él.

Uno de los aspectos en los que el conjunto blanquinegro podría hacer daño es en el balón parado, faceta del juego en la que los asturianos están sufriendo últimamente. Pese a todo, esta campaña no es el fuerte del equipo de Julián Calero.