El departamento de Medioambiente del Ayuntamiento de Miranda dio un giro tras el cambio de responsable que tuvo lugar durante el verano pasado.Entre las medidas impulsadas por la edil que tomó las riendas en 2023, María Cueva, estuvo el plan de choque para evitar la falta de personal en el área de parques y jardines. Sin embargo, esta iniciativa ha terminado fracasando, ya que, según explica la concejala, «se incorporaron dos personas durante la época de poda, pero al terminar ese periodo se fueron y debían salir dos plazas, de las que solo ha salido una». De esta manera, la administración municipal ha tenido que retomar el sistema que implementaba en años anteriores: pagar miles de euros a empresas externas para cubrir la carestía de profesionales propios.
La concejala de IU-Podemos comenta que desde que finalizó el periodo de la poda «ha habido en torno a siete personas», aunque durante el verano «se han sumado una jubilación, alguna baja y las vacaciones». Por ese motivo, Cueva describe que el servicio se ha quedado únicamente con «tres jardineros, cuando la ciudad necesita muchísimos más por toda la superficie de zonas verdes que tiene» y no han tenido más remedio que externalizar una parte. Aunque aún no se ha cerrado el ejercicio, en Medioambiente estiman que cada año la ciudad gasta hasta 200.000 euros en firmas privadas para suplir sus carencias en materia de personal.
Los trabajos encargados a este tipo de compañías durante los últimos meses, según apunta Cueva, se han centrado de nuevo en «cuidar la periferia». Y es que para los 600.000 metros cuadrados de jardines que acumula Miranda, los tres empleados municipales disponibles solo han dado abasto para encargarse «de las zonas más céntricas», entre las que se encuentran los parques Antonio Machado o Antonio Cabezón, entre otros. Pese a ello, la concejala insiste en que trabajan para incorporar al menos a otras dos personas, además de recuperar a las que han faltado por motivos puntuales, pues opina que «la externalización de los trabajos está suponiendo un gasto mayor».
Eso sí, el mayor desembolso que realiza la administración local dentro del área de Medioambiente no está relacionado con el cuidado de parques y jardines, sino que se centra en la limpieza viaria y la recogida de basuras. En este apartado, Cueva describe que, tras la entrada de la «empresa de control de calidad» encargada de vigilar a la adjudicataria, los operarios se han centrado en eliminar la suciedad «de aceras y puntos conflictivos donde hay mayor acumulación» de manchas desde años.
Según relata la concejala de IU-Podemos, «recientemente se ha limpiado el pasadizo de la calle Vitoria, que estaba muy mal, y durante estos días se está haciendo la calle Condado de Treviño, que se suma a la Juan Ramón Jiménez, que se hizo hace poco». Ahora bien, en puntos como este último, Cueva cuenta que «se ha acumulado tanta suciedad que la máquina no logra eliminar la mancha», de tal forma que «se ha desinfectado pero la baldosa se ha deteriorado y ya no vuelve el color original».