El Ministerio de Educación y Formación Profesional no ha pasado por alto el trabajo que se realiza en las aulas de FP de Burgos en materia de innovación y posterior aplicación a la industria. Hasta ocho centros de la capital y la provincia han sido seleccionados para desarrollar 13 proyectos en estos ámbitos, para lo que recibirán en su conjunto más de 500.000 euros, tal y como recoge una reciente resolución de ayudas públicas de apoyo a estos estudios a través de fondos procedentes de la Unión Europea.
La convocatoria presenta la particularidad de que los proyectos presentados se realizarán en colaboración con dotaciones educativas de distintos puntos de España y con la participación de empresas, de tal forma que incentive la transferencia de conocimiento. Entre los aspirantes, destaca el éxito del centro Simón de Colonia, ubicado en el polígono docente del Vena, con seis proyectos financiados y 250.000 euros en ayudas, lo que viene a reforzar su certificación como instalación de excelencia de estas enseñanzas con la que fue reconocido en 2022 por este Ministerio.
Su directora, Nieves Ausín, subraya el buen resultado obtenido en el programa estatal y explica el camino en el que se avanzará con el fin de mejorar la «capacitación práctica del alumnado». Se trata de dar un paso más en el mundo de la robótica con la programación de dispositivos móviles que aplicar a la industria, ya que hasta el momento los conocimientos se han centrado en el desarrollo de robots estáticos. «Mejoraremos los estudios con esta formación complementaria», precisa, no sin antes agregar que se desconoce la fecha en la que podrán arrancar, ya que la cartera que dirige Pilar Alegría todavía no ha liberado los fondos. De igual forma, los trabajos elegidos incluyen otros ámbitos de aprendizaje como la gestión energética o la inteligencia artificial (IA).
El centro Juan de Colonia también ha sido reconocido en esta convocatoria con un proyecto sobre ciberseguridad en redes industriales, al igual que el colegio Jesuitas, con otro sobre robótica aplicada a la logística, y el Padre Aramburu, que desarrollará junto a un instituto de Barcelona y a la ingeniería local Ingaut, experta en control industrial, un sistema de automatización para acercar productos farmacéuticos al medio rural. En Aranda de Duero son tres los centros de FP que recibirán apoyo público. El instituto Juan Martín El Empecinado participará en un proyecto sobre FP Dual en ciclos de mantenimiento y mecanizado; San Gabriel lo hará en un trabajo en el que se vincula el mundo de la robótica y el vino, y el Santa Catalina en otro sobre fabricación mecánica y visión artificial. Finalmente, el Instituto Técnico Industrial de Miranda de Ebro pondrá en marcha un trabajo de aprendizaje colaborativo en laboratorios de fabricación avanzada.