Tres ascensos a sus espaldas y 32 años de edad. Desde La Guancha (Tenerife) hasta Burgos, ese es el camino que ha seguido Ayoze Alonso, capitán del Grupo Ureta Tizona y uno de los jugadores emblema del conjunto burgalés. Con esta, serán seis las temporadas en Burgos, y afronta este nuevo curso con la misma ilusión y ganas que en el primero de su carrera profesional.
Es su sexta temporada en el club, ¿cómo la afronta?
Con la ilusión de siempre. Es verdad que las cosas han cambiado algo respecto al año pasado con el nuevo entrenador y algunos fichajes, pero seguimos con la misma filosofía. Cada año vengo con la ilusión de intentar hacer las cosas bien y ayudar al equipo. Tanto tiempo parado durante el verano hace que lo eches de menos, por eso siempre hace ilusión el regreso con los compañeros.
Su renovación se hizo de rogar, posiblemente ligado al cambio de entrenador con la llegada de Salva Camps, ¿dudó en algún momento sobre su continuidad?
Es cierto que estuvimos esperando un poco por ese factor. Al principio sí que se habló de la posible renovación, pero quedó un poco parada hasta la llegada del nuevo míster. Cuando llegó Salva Camps, reanudamos las negociaciones y pudimos llegar a un acuerdo.
Durante ese periodo de espera, ¿tuvo otras propuestas encima de la mesa?
Tuve alguna que otra, pero yo siempre estuve centrado en esta. Yo quería estar aquí porque es un club que siempre me ha tratado muy bien y no me interesaba irme a otro lugar.
¿Cómo ve al equipo con las llegadas, las renovaciones y las salidas de jugadores importantes?
Bien, a mí me gusta la plantilla. El club ha buscado jugadores que se adapten a la filosofía del equipo y es verdad que, en los pocos días que llevan aquí, se han adaptado bien. Encajan en lo que se quiere. Las bajas han sido de jugadores importantes, pero la entidad y la dirección deportiva han buscado bien en el mercado, estando rápidos y consiguiendo a muy buenos jugadores.
En el tramo final de la temporada pasada tuvo más de un problema físico que le impidió estar con sus compañeros en momentos clave, ¿cómo lo vivió?
Tuve una brecha en la ceja en la última parte de la temporada regular y me perdí varios partidos. No poder ayudar a tus compañeros siempre fastidia y más aún en la parte del curso donde se resuelve todo. Por suerte, me recuperé bien y en los últimos partidos ya pude estar con el equipo.
Este año han metido una nueva competición como es la Copa España y su primer partido del curso va a ser precisamente en este torneo contra el Silbö San Pablo B. Se dice que esto va a cargar mucho el calendario de los equipos, ¿piensa lo mismo?
Hasta que no llegue el momento de competir no se puede llegar a una conclusión de como nos afectará. Es cierto que pilla cerca del comienzo liguero, pero a mí me parece una buena propuesta que puede servir como una especie de preparación o pretemporada para la liga.
El año pasado llegaron a la Final Four y cayeron en semifinales. Este año parece que la competición se ha puesto aún más dura, con el descenso desde la ACB del Zunder Palencia y el Monbus Obradoiro. Otros equipos también están haciendo incorporaciones impensables años atrás para una liga como la Primera FEB, ¿puede ser la liga más dura en los últimos años?
Siempre que va a empezar la temporada, me parece la más dura. Se nota que el campeonato va creciendo con los años y así se demuestra tanto por rendimiento como en las incorporaciones. Los equipos que descienden desde ACB no siempre consiguen volver y eso hace que el nivel de la liga vaya subiendo y a nivel económico se puedan traer mejores jugadores. Este año se presenta muy atractiva por ese mismo factor. Hay muchos candidatos a estar en las posiciones de arriba y cuantos más equipos haya luchando por esas plazas mas entretenida será la competición.
¿Estarán de nuevo esta campaña luchando con esos equipos, a priori, favoritos para ascender a la Liga Endesa?
No nos marcamos objetivos a largo plazo. Es lógico que queramos repetir lo del año pasado, porque es muy difícil estar entre los cuatro mejores para ascender. Intentaremos estar lo más arriba posible, sin renunciar a nada y mejorando cada día para ir creciendo. Al final, el trabajo diario y superar los objetivos a corto plazo es lo que nos va a permitir conseguir grandes cosas.