El Consejo de Dirección del Grupo Parlamentario Vox en las Cortes de Castilla y León acordó ayer la expulsión de los procuradores por Burgos, Ana Rosa Hernando Ruiz, y Salamanca, Javier Bernardo Teira Lafuente, a los que exige que devuelvan sus actas, por sus «opiniones y valoraciones movidas, que duda cabe, por ambiciones personales», según un comunicado de la formación recogida por Ical. El grupo se queda, de esta forma, con 11 procuradores. La suma de PP y Vox superaría igualmente la mayoría absoluta. La dirección nacional del partido, consultada por Ical, respaldó la decisión y aseguró que su posición se ajusta a la expresada por el Grupo Parlamentario.

Este órgano se reunió ayer y está formado por el portavoz del Grupo, Juan García-Gallardo; el secretario general del mismo, David Hierro; y el portavoz adjunto, Carlos Menéndez, que han adoptado esta medida en el ejercicio de sus funciones, y en aplicación de lo dispuesto en el artículo 24 del Reglamento interno del Grupo, «ante la gravedad de los hechos protagonizados» por los dos procuradores.

La formación aclaró que los dos procuradores no forman parte de ningún órgano interno o estructura de Vox, «por lo que sólo se representan a sí mismos» y, defendió que «no es lo más correcto hablar de rebelión de Vox», sino de «opiniones y valoraciones movidas, que duda cabe, por ambiciones personales».

Además, el comunicado recordó que ambos son cargos electos por un sistema de designación que «ahora critican y dicen no compartir, disconformidad que no mostraron al ser designados». «Como cualquier formación política de ámbito nacional, el sistema de designación de candidatos está recogido en los estatutos de la formación, en este caso amparados por el 93 por ciento de sus afiliados hace menos de un año», manifestó la organización.

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