A la espera de poder poner en práctica las directrices del Plan Director de la muralla, el Ayuntamiento tendrá que actuar a corto plazo en dos tramos del lienzo entre el arco de San Martín y Los Cubos para su consolidación con una inversión que podría rondar entre los 400.000 y 500.000 euros, a la espera de lo que determine el proyecto. 

Al menos esa es la decisión que se adoptó ayer en una reunión técnica y política entre las áreas de Urbanismo y Patrimonio Municipal a la que acudieron también los redactores del documento que analiza el estado de la fortificación, tras el desprendimiento de varias piedras en la Puerta de la Judería el pasado 28 de septiembre. Como consecuencia de la caída, el acceso a las escaleras por las que se entra al bloque de viviendas permanece cerrado con una valla de bomberos y unas cintas desde ese día como medida de precaución. 

Según confirmaron fuentes municipales, en los próximos días se sacará un contrato menor para la redacción de un proyecto para la consolidación de los tramos 3 (Arco de San Martín a la Puerta de Doña Lambra) y 3 desde esta zona hasta el final del paseo de Los Cubos, que estará elaborado en dos meses. Sin embargo, las obras tendrán que esperar a 2025, previsiblemente avanzado el primer trimestre debido a que el presupuesto del próximo ejercicio está prácticamente cerrado y habrá que esperar a la primera modificación de crédito para incorporar la partida necesaria.

Puerta de la Judería. Previamente a la intervención señalada, está previsto sacar un contrato de urgencia para colocar un sistema de andamiaje en la Puerta de la Judería que proteja de nuevas caídas y poder abrir esta entrada a las viviendas. Desde que se produjo la caída de piedras los vecinos se ven obligados a emplear la salida de vehículos y servicio ubicada en la calle de Santa Águeda.

Se estima que el contrato tendrá un coste de entre 20.000 y 25.000 y estará colocado al menos hasta el 30 de junio, según indicaron fuentes municipales. Técnicos municipales han comprobado el estado en el que se encuentra todo el lienzo y concluyeron que era necesaria su consolidación. Según las primeras estimaciones, la caída de las piedras puede obedecer a que hay mucha vegetación incrustada entre las piedras y las ha podido ir moviendo. De hecho, en algún tramo se ha desprendido la fábrica debido a la climatología y han quedado a la vista los rellenos. También se encuentran deteriorados los tramos de escalera por el paso del tiempo y por la falta de mantenimiento.

Según el Plan Director, esta zona la muralla presenta una fábrica muy uniforme con un paramento exterior de mampostería concertada de piedra caliza y el paramento interior también es bastante uniforme. La actual Puerta de la Judería se mantuvo tapiada hasta 1973 cuando se abrió para comunicar un edificio de viviendas con el Paseo de Los Cubos. 

Precisamente, en la segunda fase del Plan Director de la muralla se hacía incidencia en la necesidad de actuar en este tramo.