La asamblea local de la Asociación Española contra el Cáncer está satisfecha con el resultado de los llamamientos a participar en el cribado de cáncer de colon, pero asegura que las cifras se pueden mejorar. El objetivo a alcanzar está fijado en el 65% de la población diana, que son aquellas personas entre los 50 y los 69 años sin antecedentes de problemas digestivos, pero la media de los tres centros de salud de la capital ribereña está en el 42%, siendo el sur en el que más pruebas se logra, con un 45,8%, seguido del norte con 41,6% y muy cerca el rural con 40,7%. «Ha aumentado el número de gente que se somete al cribado, tuvimos un par de años en los que bajó por la covid, pero ha ido ascendiendo en 2022 y 2023», puntualiza Eva María Asensio, presidenta de la AECC Aranda.
Del total de las pruebas que se realizaron el año pasado, el 5% de media entre los tres centros de salud dieron resultados positivos. «Es un porcentaje bajo, cuando empezamos los cribados estaba en torno al 7% y lo hemos ido bajando porque toda la población que tenía algo ya está detectado», asegura Asensio, destacando que en 2023 se detectaron cinco casos de cáncer gracias al cribado, lo que favorece la atención precoz de esta dolencia. «Son pacientes asintomáticos que gracias al cribado se les ha detectado pronto, además de verse otras dolencias de bajo riesgo que son premalignas y que se pueden quitar y evitamos que desarrollen la enfermedad», explica las ventajas de este programa de detección, ya que «disminuye la incidencia de la enfermedad y disminuye la agresividad de los tratamientos».
Asensio, recuerda que «el cáncer de colon es el más frecuente juntando hombres y mujeres y el que más puntos ha subido la supervivencia en los últimos años, que está en un 63%». Por eso, desde la AECC animan a la población diana a que se haga la prueba que, además, es «sencilla, no es agresiva, barata y accesible», por lo que no hay excusas para no hacérsela.