El Centro de Cooperación y Acción Solidaria de la Universidad de Burgos lanza una campaña de recogida de material con destino a algunas de las zonas más castigadas por la guerra de Siria. En colaboración con la oenegé Apoyo al Pueblo Sirio, la institución académica buscará la implicación de toda la comunidad universitaria, así como de los ciudadanos en general con el fin de poder enviar el mayor número posible de mantas (nuevas o de segunda mano); comida en lata (preferiblemente que no lleve cerdo y tengo una fecha de caducidad de al menos un año), y artículos para bebés, tales como biberones, pañales o cunas.
La iniciativa parte de la UBU, a instancias de una petición de la citada entidad social, y busca involucrar al resto de universidades públicas de Castilla y León para lograr una mayor movilización. Las instituciones académicas, bajo la coordinación del campus burgalés, se encargarán de enviar el material recabado a la sede de la ONG en Madrid, que a su vez se ocupará de transportarlo hasta ciudades como Homs o Alepo, según detalla la responsable del Centro de Cooperación, Esther Gómez.
La intención pasa por poner en marcha la campaña la próxima semana, aprovechando el arranque del curso académico, al tiempo que en breve comenzará a darse a conocer a través de las redes sociales. De igual forma, el departamento universitario se quiere poner en contacto con los decanos de las facultades con el fin de promocionar la iniciativa. «El colectivo universitario siempre está muy sensibilizado con los temas de carácter social», afirma Gómez.
Medidas de la CRUE
Además de esta acción, la UBU también respalda las medidas aprobadas recientemente por la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) para ayudar a los refugiados, que incluyen la promoción de medidas de voluntariado y facilitar la acogida de jóvenes asilados que sean universitarios en sus países de origen, así como la de profesorado. Respecto a estas dos últimas, el vicerrector de Estudiantes y Extensión Universitaria, René Jesús Payo, asegura que las instituciones académicas han acordado reunirse próximamente para adoptar una postura común al respecto.
En cualquier caso, Payo avanza que la Universidad se suma a la iniciativa adoptada por todos los grupos políticos para que Burgos se convierta en ciudad de acogida, al igual que a la mesa de apoyo a los refugiados que propuso crear el Ayuntamiento el pasado jueves para buscar la implicación de otras administraciones, entidades y organizaciones no gubernamentales. «Una vez que se sepa el cupo, tendrá que haber una reunión por parte de todas las instituciones implicadas para saber lo que puede hacer cada una», subrayó el responsable académico.