La jueza sí ve una "posible agravante" de odio en el crimen

FERNÁN LABAJO / Burgos
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Descarta la imprudencia por la violencia del golpe a Sergio Delgado. En el auto de prisión habla de varios testigos que ratifican la procedencia de la víctima como detonante. La pena por homicidio doloso iría de 10 a 15 años

Los hechos tuvieron lugar el pasado sábado en La Flora. - Foto: db

La violencia con la que J.L.N.I. golpeó en la cara a Sergio Delgado la madrugada del pasado sábado en la plaza de La Flora es suficiente para descartar de plano la imprudencia del ataque y comenzar una investigación por un homicidio doloso. Así al menos lo cree la titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Burgos, que el martes mandó a prisión provisional al presunto agresor del joven vallisoletano.

El matiz es importante, pues la tesis que sostiene indiciariamente la magistrada contempla unas penas mucho más altas, siendo la máxima de 15 años de cárcel. Plantea además la posibilidad de que existiera un agravante por motivos de odio. El auto de la jueza hace un relato de los hechos prácticamente calcado al que ha contado DB en los últimos días en base a las declaraciones de los testigos y del propio investigado ante la Policía.

Poco antes de las 5 de la madrugada del 24 de febrero, Sergio Delgado se encontraba en el pub Madame Kalalu de la plaza de la Flora, donde también estaba el presunto agresor. A la salida, ambos entablaron una conversación en la que, supuestamente, J.L.N.I. preguntó si era de «Pucela». Al responder que sí, le propinó un puñetazo en el rostro que le hizo salir despedido hacia atrás, impactando de forma violenta contra el suelo. Los servicios sanitarios no pudieron hacer nada para reanimarle.

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