Una casa de dos plantas que desvela el pasado de Poza

S.F.L. / Briviesca
-

Las excavaciones llegan al suelo de la villa romana, donde han hallado restos del tejado, cerámica y material orgánico de vigas y muebles, y recuperan todos los restos de pintura mural de una estancia

La directora de la excavación, Esperanza Martín, clasificando los restos de pintura que han aparecido en el yacimiento pozano. - Foto: S.F.L.

Los últimos hallazgos en la casa de las flores de la ciudad romana de Flavia Augusta han generado tanto interés en el equipo de arqueólogos -dirigido por Esperanza Martín que- que las excavaciones continúan a pesar de que ya han alcanzado el suelo y encontrado restos de parte del tejado. Al despejar la última capa de derrumbe de los muros de la vivienda que se superponía a la superficie, además de aparecer materia orgánica de elementos fabricados con madera, han hallado tejas, restos de «cerámica roja que sitúan entre finales del siglo II y principios del III la época de construcción de la casa, y descifrado el modelo constructivo, un hecho muy importante para nosotros, ya que ahora sabemos que en la vivienda había dos plantas, una baja y una primera alta», explica la directora.

A dichos avances hay que añadir la aparición de material procedente de las vigas de madera, de una escalera ubicada a mano derecha del acceso al piso inferior y de los muebles. Respecto a la distribución de la edificación «nos hacemos idea de como era a través del georadar. También de que nos encontramos en la zona nuclear de un edificio de grandes dimensiones rodeado por un peristilo con varias habitaciones consecutivas en línea recta y un pórtico», añade. 

Los pasos dados durante la campaña actual -en la que ya solo trabaja Martín y su compañero de fotografía, escaneado y digitalización de piezas, Zoilo Perrino- han permitido comprobar que los muros del inmueble se vinieron abajo de manera natural y no fueron derribados, «por lo que los fragmentos de la cerámica hallada y sellada por los alfareros que las fabricaron han aparecido repartidas por varias zonas de la estancia. Las características de estos elementos decorativos, que van cogiendo forma gracias al pegamento, y los conocimientos existentes sobre ellos nos sitúan en ese lapso temporal del Imperio Romano ya avanzado», añade. No obstante, el equipo espera los resultados de los análisis de las muestras de carbono 14 que enviaron a un laboratorio de Lituania para concretar la fecha de la construcción de la vivienda.  

Asimismo, durante estas semanas han logrado cumplir con uno de los objetivos marcados y extraer toda la pintura mural que decoraba la estancia. Miles de fragmentos de diferentes tamaños, algunos de grandes dimensiones y otros de poco más de dos centímetros cuadrados, han sido recuperados, aunque el trabajo de limpieza y análisis se alargará durante meses. «Calculo que superamos los 5.000 trozos, apenas nos queda espacio en las estanterías para almacenar más, y al tratarse de piezas tan diferentes es fundamental su digitalización para poder manipularlas virtualmente, sin necesidad de usar las reales, y conseguir a futuro realizar la reconstrucción», comenta.

La residencia recibe su nombre por las figuras que aparecen representadas en sus muros, como motivos florales, festones, grafitos figurativos aviformes o casetones entre otros elementos que fueron diseñados y coloreados en tonos rojizos, amarillos, ocre, negro, verde o azul por artistas que contrataban los propietarios adinerados para resaltar las estancias de las casas, algo que no estaba al alcance de todos. Si bien, los últimos restos confirman también «la utilización del color blanco, sobre todo en los casetones del muro», aclara Martín.

Próximas campañas. El Ayuntamiento de Poza de la Sal pretende continuar apoyando el proyecto de cara a intervenciones futuras aunque por el momento desconoce la inversión que destinará para que los arqueólogos descifren el pasado de la villa salinera. Esperanza Martín, que ha optado por alargar su estancia más de lo que en un principio se había planteado (mes de octubre) agradece la voluntad de los vecinos en participar en los trabajos y confía que en próximas actuaciones tendrán la oportunidad de «continuar aportando». 

Por otro lado, las visitas guiadas al yacimiento y laboratorio programadas de miércoles a domingo han finalizado porque la directora de la excavación es la única persona que sigue trabajando a pie de campo en la actualidad.