La falta de agentes de la Guardia Civil tras el concurso de movilidad ha hecho saltar todas las alarmas en la provincia y desde la comarca Odra-Pisuerga ya ponen el grito en el cielo ante esta situación de «abandono» que conlleva una menor seguridad en los pueblos. La situación más preocupante se ha producido en Villadiego, donde el cuartel se encuentra actualmente cerrado al no tener suficientes efectivos. Mientras, en Castrojeriz y en Melgar de Fernamental se han quedado con unos servicios tan mínimos que no llegan a cubrir todo lo que se demanda en la zona.

En el caso de Villadiego las puertas de su cuartel permanecen cerradas y por el momento impera el desconocimiento sobre lo que ocurrirá en el futuro. «Me molesta que nadie me haya avisado de nada, si es verdad se debería notificar al alcalde», asegura el regidor, Ángel Carretón. Eso sí, parece que abrirá algún día para la recepción de denuncias.

En el último proceso de traslados la Comandancia se ha convertido en una de las más perjudicadas de España, ya que alrededor de 140 agentes han optado por otros destinos y solo 30 por este territorio. Un preocupante saldo negativo que según exponen desde la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) no se solucionará, por lo menos, hasta abril y hará falta más de una convocatoria para cubrir todos los puestos. Otros puntos como Miranda o Medina también han salido muy mal parados.

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