Roberto López de Davalillo anunció que dejaría el cargo tras las fiestas hace poco más de una semana. La Asamblea General del 1 de abril supuso un golpe que no pudieron superar. La gota que colmó el vaso. Ahora, él y su junta tratan de mirar al mes que queda para San Juan del Monte con una ilusión clara, que pasa porque la ciudad solo respire buen ambiente en esas jornadas, algo que no le ha acompañado desde que asumió la presidencia. 

Queda poco más de un mes para las fiestas y ya ha comunicado una de las principales novedades, ¿qué sensaciones ha recibido?
Con Los 40 Sesions intentamos atraer a gente y dar también la oportunidad a dj de Miranda para darles visibilidad. Nuestra intención es llegar a esos 150 ó 200 kilómetros a la redonda, porque yo que tengo una edad, recuerdo cómo antes venía gente de Bilbao un sábado normal. Por la calle ha gustado, aunque hay gente de mi edad a la que puede que no le atraiga mucho, aunque son primeras figuras y al final la gente espero que se anime. 

Sí que se ha criticado la presencia de djs, por la premisa de evitar esa música para dar protagonismo a las charangas.
No tiene nada que ver. Sigo defendiendo lo de la música de las charangas. El formato de los dj se lleva mucho y es cierto que a la gente joven hay que darles algo, como también es cierto que el domingo haremos una verbena y una macro para los chicos. Esto de Los 40 lo seguimos ajustando, pero los de Miranda pincharán a las nueve o diez de la noche, que a esa hora la gente ha empezado a cenar y las charangas ya han parado. No es lo mismo a lo que se ha hecho otros años, que era de locos porque cada 20 metros había música con un ruido ensordecedor. 

Estar en la presidencia es muy complicado»

¿Quedan más sorpresas en el programa o está todo inventado?
San Juan del Monte tiene un recorrido muy claro. El año pasado se nos ocurrió la concentración de charangas, lo repetiremos y volverá a ser un momento bonito. Todo lo que sea sumar, como el pregón el viernes, tiene que ser bienvenido. 

En cualquier caso, lo que queda por delante será frenético...
Sí, ahora todos los días lo son. Por eso cuando presentamos la dimisión nos parecía que era una irresponsabilidad no continuar hasta después de fiestas, aunque haya mucha gente de la directiva abrasada. Se puede criticar, pero atacar por atacar lo único que provoca es hacernos más pequeños. Con el tiempo igual alguno lo ve. 

Hace una semana que anunció su dimisión y la de su directiva tras las fiestas. ¿Se ha quitado un peso de encima?
Tampoco es eso. Lo he dicho muchas veces, no debo nada a nadie y el que me conoce ya sabe cómo soy. Que venga alguien y te diga lo que sea te hace crecer y todos nos equivocamos, pero se ha visto una caza de brujas. El día de la asamblea me preguntaba qué era eso, porque dos y dos son cuatro. Luego circulan mensajes anónimos y no entiendo cómo no vienen a la Cofradía. 

No nos hemos llevado un duro y el que tenga dudas que venga a mirar las cuentas»

Habla de un mensaje que circula con dudas sobre las cuentas, ¿siente que esa caza de brujas continúa?
Son ganas de hacer daño y creo que ya vale. Estar en la presidencia es muy complicado y la gran mayoría de la gente pasa de todo, pero nosotros hemos intentado hacer cosas para no perder señas de identidad, porque tenemos que saber de dónde venimos y hacia dónde vamos. Sí que hay que dejar claro que no nos hemos llevado un duro y el que tenga dudas que venga a mirar las cuentas.

Una de las críticas que se ha hecho tiene que ver con la alubiada y el precio de 22 euros, ¿qué le parece?
La alubiada, con la comida, los camareros, las sillas y las mesas cuesta 22,08. Ahí no contamos ni la carpa, ni los baños, ni los planes de emergencia o evacuación. El año pasado les ofrecimos a los hosteleros que ofrecieran menús y no salió, pero ahora lo ponen a 15 euros. Es muy lícito que todo el mundo pelee por su negocio y trate de ganar dinero, pero no todo vale. Con la carpa busco que las cuadrillas no tengan que irse de Miranda, solo eso. Luego se puede malinterpretar, se puede dar mil vueltas, pero lo hacemos por el bien de la fiesta. Los que estamos aquí no cobramos un duro y cuando lo dejemos creo que la cola va a llegar hasta la M de la gente que se va a presentar a la Cofradía.

¿Va a costar el relevo?
Siempre he creído en el ser humano. Nosotros hemos pecado de inocentes y ves cosas que sorprenden. Es complicado y si hubiese hecho un corta pega, pues la gente hubiese dicho qué majo es Roberto, pero para eso no estoy aquí. Lo de sacar barras a la calle...es que necesitamos sacarlas porque la fiesta es de calle, pero lo que no queríamos es lo que había antes. En aquel comunicado de las barras igual me equivoqué, pero vamos a enterrar el hacha de guerra y vamos a mirar por las fiestas. No quiero ni fastidiar a los hosteleros ni a los ochotes.

No quiero ni fastidiar a los hosteleros ni a los ochotes»

A esta junta directiva, ¿le han quedado muchas cosas por hacer?
Con el recorrido de los cuatro años hubiésemos hecho muchísimas cosas porque teníamos muchas ideas. Hace meses tratamos de hacer un día festivo el 4 de mayo, cuando se expondrán los coches clásicos. Queríamos hacer catas, pinchos y lo hablamos con el Ayuntamiento, pero al final no ha salido, porque hay cosas que te quitan la ilusión, como el día de la Asamblea. Había proyectos con Diputación y la Junta y sigo con las ganas, porque esté yo o no esté, qué más da, si es para mi pueblo.

¿Todas las polémicas han robado mucho tiempo a las fiestas?
El año pasado pasamos un montón de horas con el tema de la hostelería y no había más que fuegos. Tenemos que mirar por todos los cofrades y las polémicas nos han robado mucho tiempo y energía. Lo que se habló con las txoznas por ejemplo. Tenía un sentido económico para la Cofradía de locos. El hostelero de cualquier parte de la ciudad tenía que ir y poner el personal y punto, porque nosotros poníamos todo. Aun así, vimos que había vecinos y declinamos, pero lo teníamos todo. Sí que dejas a la ciudad un poco fuera, pero reculamos porque igual no era el momento, pero podíamos haber traído un concierto que atrajera a 10.000 o 15.000 personas, porque lo hubiésemos generado.

El año pasado no disfrutó de las fiestas, ¿este año podrá hacerlo?
La responsabilidad es muy alta, pero este año me han impuesto que disfrute y espero conseguirlo aunque sea difícil.

Era una irresponsabilidad no continuar hasta después de fiestas, aunque haya mucha gente de la directiva abrasada»

Los sanjuaneros cuando se ponen la blusa son capaces de dejar atrás todas las polémicas, ¿espera que sea así?
Sí claro. San Juan del Monte es para disfrutarlo. Al final de todo esto sacaremos que hubo una junta directiva que no se amilanó y que puso un rumbo, que podía ser equivocado, pero que tenía una idea clara. Solo pido a los sanjuaneros que se olviden de la Cofradía y que disfruten, que para eso son las fiestas.