El Parque de Maquinaria de la Diputación de Burgos tiene su base central en las naves de Valdechoque (frente a Hipercor) y una delegación en Villarcayo, a la que podría añadirse otra, también en Merindades, para dar una mejor respuesta sobre todo en invierno a las carreteras de la zona norte de la provincia, según avanzó el presidente, Borja Suárez, al presentar los tres nuevos vehículos incorporados a la flota.

Se trata de dos tractores, que hacen las funciones de vialidad invernal y también de desbroce de las cunetas en primavera, y un camión basculante que además de cuña quitanieves incorpora un equipo para esparcir fundente, en los que se han invertido más de 660.000 euros, con la intención de renovar la flota al tener que dar de baja algunos vehículos y velar por la seguridad de los trabajadores. 

La Diputación mantiene tres brigadas de Vías y Obras, dos en Burgos y otra en Villarcayo, con «un mínimo de personal» y recurre a la contratación de empresas para prestar el resto de servicios de mantenimiento y limpieza. «Es uno de los servicios de los que se siente más orgullosa la Diputación y de los que creemos que tiene que mantener, al margen de que externalicemos más o menos», reseñó Suárez en su visita al Parque de Burgos, acompañado por el diputado José Antonio de los Mozos.

Carreteras municipales. Ambos avanzaron que el próximo año no habrá convocatoria de la línea de ayudas para carreteras municipales, ya que acaban de terminar de justificarse todas las actuaciones subvencionadas en 2022 y las de 2023 están en ejecución, «pero posiblemente la retomemos el próximo... siempre y cuando sea palpable la necesidad y tenga un sentido, sirva para completar la red y conectar localidades», explicó Suárez, que, sin embargo, no asumirá ninguna labor de limpieza o conservación en ellas. «Lo que hace la Diputación es establecer líneas de ayuda para esas carreteras que son municipales, por lo tanto, el deber de mantenimiento corresponde a los ayuntamientos», concluye.

Novedades para la CL-629. Borja Suárez acudió el jueves a Valladolid para presentar a la consejera de Movilidad, María González Corral, el anteproyecto del Plan de Carreteras de la Diputación de Burgos, que prevé invertir 40 millones de euros en la red provincial a lo largo del próximo lustro. «El objetivo es mejorar la seguridad, es hacer una red más competitiva, más moderna y, además, integrar un proyecto de señalética y de aprovechamiento para recursos como el cicloturismo», explica.

«Lo que le hemos pedido a la Junta de Castilla y León es que ese compromiso lo haga suyo la propia Junta, sobre todo en las inversiones preferentes, que en la provincia de Burgos están en el sur, en Salas de los Infantes y en Merindades», apunta el presidente de la Diputación. En este sentido, anuncia novedades con respecto a la zona norte.

Los alcaldes de los grandes municipios que atraviesa la CL-629, Medina de Pomar, Villarcayo, Espinosa de los Monteros, Valle de Mena y Merindad de Montija, se unieron hace meses para urgir las obras de conversión de esta carretera en vía rápida, resignados ya a que no se transforme en autovía. Pidieron cita en febrero con la consejera sin que hasta la fecha haya trascendido reunión alguna.