Pascual, GSK y Michelin gastan cada día más en ciberseguridad

L.N. / Aranda
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Las tres compañías llevan «muchos años» volcadas en este ámbito, «ya que el riesgo siempre está presente». De hecho, buscan estas competencias en los nuevos perfiles para trabajar en sus fábricas

Vista general de las instalaciones de Pascual en Aranda, donde trabajan para preservar su información y procesos de cualquier ciberataque externo. - Foto: Luis López Araico

Las tres multinacionales implantadas en Aranda de Duero, Pascual, GSK y Michelin, suman «muchos años» trabajando en digitalización y ciberseguridad. Según explican, se trata de una vía de progreso y desarrollo clave en el ámbito industrial. De hecho, las tres destinan cada vez más presupuesto a esta materia.

Lorena Jurado, directora de Ciberseguridad e Infraestructuras de Pascual, subraya que «cada día surgen nuevas amenazas a las que hacer frente y nuevas herramientas que nos obligan a adaptarnos a nivel presupuestario para poder abordar las necesidades en cada momento».

Mientras, en GSK remarcan que han reforzado su compromiso con la seguridad cibernética. Sobre todo, porque su infraestructura resulta crítica para producir medicamentos que salvan la vida de millones de personas en todo el mundo. De ahí la gran importancia de proteger su información y sistemas contra posibles amenazas de seguridad cibernética que «pueden causar daño a pacientes y empleados, así como interrupciones en el suministro de los medicamentos a los pacientes que los necesitan».

Para evitarlo, llevan a cabo una monitorización constante del entorno «y acciones rápidas frente a cualquier riesgo», además de invertir en nuevas tecnologías. En el caso de Michelin destacan que la transformación digital de la fábrica «es una leva fundamental para construir el futuro y pilotar el progreso».

Ante estas circunstancias, la formación en ciberseguridad se antoja fundamental. De hecho, en empresas como GSK detallan que estas competencias «son uno de los conocimientos más solicitados y requeridos en los nuevos perfiles para trabajar en la compañía y en la fábrica de Aranda en especial». 

Al final, en las tres empresas reconocen que «el riesgo siempre está presente», como afirman en Michelin, y esto les obliga a emplear cuantos recursos sean necesarios «para seguir avanzando». 

Por su parte, Jurado admite que «Pascual sufre ataques diariamente que conseguimos frenar y que no afecten a la operativa del negocio». No obstante, en la empresa láctea se mantienen en alerta, con un equipo de profesionales tanto interno como externo. «Hemos visto cómo grandes compañías de nuestro sector y de otros han sido atacadas, provocándoles grandes pérdidas. De esta manera, lo más sensato es seguir trabajando en proteger nuestra compañía y aumentar el nivel de madurez en ciberseguridad», concluye.