Iberdrola espera terminar en aproximadamente medio año la construcción de las dos plantas fotovoltaicas que hibridarán con el complejo eólico que desde hace años funciona en el entorno de Revilla Vallejera.Se trata de aprovechar las mismas canalizaciones, redes eléctricas y subestación para conseguir un sistema «cien por cien eficiente», que cuando no hay viento puede producir energía con el sol y viceversa, apunta Fernando Martínez Riaza, responsable de Iberdrola Renovables Castilla y León.

Explica de un modo sencillo en qué consiste una planta de hibridación:En las proximidades de un parque eólico se sitúa una planta fotovoltaica «de tal forma que en aquellas épocas del día en las que no existe viento, porque normalmente sopla más por la noche y al amanecer, y sí que hay un recurso solar, es la planta fotovoltaica la que va a generar la energía», detalla. Todo ello se realiza «sin alterar mucho el terreno y sin nuevas líneas de conexión, infraestructuras  ni subestaciones», por lo que refuerza el concepto de energía verde y se minimiza el impacto ambiental.

En este caso concreto de Revilla Vallejera, la línea eléctrica de las dos nuevas plantas solares se compartirá con la de la fotovoltaica más grande, ya en funcionamiento, que cuenta con una canalización subterránea hasta la subestación «mucho más respetuosa con las aves», apostilla.

Unos 40 millones de euros prevé invertir la compañía en la construcción de este proyecto, único en España, en cuyo desarrollo se involucrarán hasta 360 profesionales. 

La compañía energética tiene otros dos focos de obra en Burgos, ambos eólicos.En Buniel desarrolla un parque de 104 megavatios y en Isar y Pedrosa de Río Úrbel otro de 50 MW (Valdemoro). Además, «hemos obtenido recientemente los permisos para poder construir los parques de Alcocero de Mola y de Iglesias, con lo cual uno de los focos más importantes de desarrollo eólico para nosotros está la provincia de Burgos», añade Martínez.

El de Iglesias tendrá los aerogeneradores terrestres más potentes que actualmente se fabrican en el mundo, cuyas multiplicadoras proceden de la planta de Siemens Gamesa en Lerma.