Si la semana pasada se conoció, a raíz de un informe emitido por la Policía Local, que el Ayuntamiento había multado el año pasado a una charanga por tocar en los Sampedros a las 1.37 horas de la madrugada y causar molestias a los vecinos, lo que se sabe también es que otros jóvenes han corrido una suerte similar y están en el punto de mira de la autoridad ya que se conoce de la existencia de la apertura de un expediente sancionador en la Concejalía de Medio Ambiente con una multa de 150 euros por la emisión de ruido con un megáfono y de otro en el que se impone un castigo de 80 euros por las molestias ocasionadas por un altavoz en la vía pública.

Aunque en ambas resoluciones se hace referencia a una infracción del artículo 55.g de la Ordenanza Municipal del Ruido del Ayuntamiento de Burgos, el castigo, por la razón que fuere, es más severo (casi el doble) por el uso del megáfono que por el del altavoz.

En el caso del ruido emitido por el altavoz en la vía pública, concretamente a la altura del número 2 de la calle Saldaña, en las inmediaciones del  CAB, los agentes dejaron constancia de que «el denunciado se encuentra junto a un grupo de jóvenes, generando notables molestias» a los vecinos. 

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