El pasado 7 de marzo, minutos antes de las cinco de la tarde, Antonio Caselli llegaba a la ciudad deportiva Universidad Isabel I del Burgos Promesas. Aquel día jugaba el equipo burgalés contra el Cristo Atlético, pero daba igual. La presencia del dueño del Burgos Club de Fútbol junto a los máximos responsables del propio Promesas y de Félix Sancho, presidente y dueño del San Pablo Burgos además de patrocinador de la entidad de Castañares, no era casualidad. Los contactos entre ambas entidades ya se habían iniciado y continuaron después. Solo 24 horas antes, Antonio Caselli y Félix Sancho comieron a solas en el Landa y fue el propio Sancho el que invitó al dirigente a las instalaciones del Promesas para el día siguiente. 

Antonio Caselli visitó los campos y el resto de estancias de la ciudad deportiva acompañado por uno de los máximos responsables del club, José Medina; y de Eduardo Ortiz, vicepresidente del San Pablo y hombre de confianza de Félix Sancho. Durante el partido, la imagen fue Antonio Caselli, con Félix Sancho y Pepe Manzanedo, uno de los creadores y actual presidente del Burgos Promesas. 

Han sido contactos discretos, pero habituales, incluso tras la marcha de Antonio Caselli a Argentina pocos días después de aquellos encuentros. Todas estas reuniones y conversaciones a tres bandas tienen un único objetivo, buscar puntos de encuentro y analizar las opciones de crear un convenio de colaboración entre ambas entidades, que poseen las canteras más numerosas del fútbol burgalés. El Burgos CF cuenta con su equipo de Segunda División B, un equipo en la máxima categoría juvenil de España, además de su propias categorías inferiores, con 11 equipos, y el potencial económico que ha aportado la familia Caselli. 

En el descanso del encuentro, José Medina (i.), directivo del Promesas, junto a Eduardo Ortiz (d.), vicepresidente del San Pablo y hombre de confianza de Sancho, acompañaron a Caselli a recorrer las instalaciones. - Foto: Patricia

El Promesas, por su parte, dispone del mejor tesoro del fútbol burgalés, su ciudad deportiva, envidia de la mayoría de los clubes de Castilla y León. Además tiene la cantera más numerosa, con 20 equipos en todas las categorías y un equipo en Tercera División, ideal para convertirse en un posible filial del Burgos CF, algo que está buscando con mucho interés el club de Franco Caselli.
intereses comunes. Ambas entidades deportivas podrían encontrar inmediatamente intereses comunes para cerrar algún tipo de convenio. Entre los objetivos de la familia Caselli para el Burgos Club de Fútbol hay tres prioritarios, más allá de llevar al primer equipo al fútbol profesional. El primero de ellos es cerrar el acuerdo con el Ayuntamiento para el convenio sobre El Plantío y poder disponer de la explotación del campo a largo plazo.

Pero hay otros dos también muy importantes. El primero de ellos es encontrar campos de entrenamiento, un gran problema que se reproduce temporada tras temporada. En este sentido ya hace unos meses Franco Caselli intentó un acercamiento con Félix Sancho, con el que se reunió para intentar un acuerdo y que el Burgos CF pudiese entrenará en Castañares. No hubo éxito.
La respuesta de los Caselli semanas después fue anunciar la compra de unos terrenos para construir su propia ciudad deportiva, aunque este proyecto es a largo plazo y con dificultades para su ejecución. Un posible acuerdo con el Burgos Promesas solucionaría de forma definitiva estos problemas del club de Caselli para poder encontrar campos de entrenamiento.

Y otro de los proyectos es encontrar para la próxima temporada un equipo filial, que sirva de trampolín para jóvenes como los del equipo de División de Honor juvenil antes de dar el salto al primer equipo.

La ciudad deportiva de Castañares costó 2 millones de euros, según datos del club. Cuenta con cinco campos, 11 vestuarios, gimnasio, sala de vídeo y sala de reuniones. - Foto: Jesús J. Matías

El Promesas tiene un equipo en Tercera División, uno de los punteros de la categoría, que incluso lucha por ascender a Segunda División B. Y es ahí donde entra Félix Sancho, que desde el pasado verano es el principal patrocinador de este equipo, donde ha invertido una importante suma económica para luchar por el ascenso. Si lo logra chocarían los intereses de ambos clubes. Sin embargo, con un acuerdo este problema no existiría ya que el equipo de Tercera y Félix Sancho aparcarían sus ambiciones de ascenso y se convertiría en el filial del Burgos CF.

Y otra parte muy importante en ambas entidades es la cantera. El Burgos Promesas tiene desde su creación en el año 2000 esa apuesta como su gran objetivo. De hecho ha sido su especial dedicación, incluso llegando a tener un juvenil en la máxima categoría del fútbol español y sacando jugadores de la talla de Diego Rico.

El Promesas cuenta con 20 equipos, una escuela de fútbol y la experiencia que le ha dado sus 20 años de trabajo con los más jóvenes.

Ahora falta saber si todas estas gestiones más o menos discretas acaban en algún tipo de acuerdo.