"Seguimos sin entender por qué Abascal rompe los gobiernos autonómicos y seguimos sin entender por qué en este caso Abascal vuelve a romper el pacto de ciudad en Burgos". Así ha valorado esta mañana el presidente provincial del PP, Borja Suárez, la situación política vivida en la ciudad los últimos días, que ha terminado con la ruptura del pacto de gobierno municipal y la salida de los concejales de Vox del mismo.

Suárez insiste en que la crisis obedece a "una decisión de Madrid", en referencia a una extrategia nacional de Vox y su presidente, Santiago Abascal, y subraya que su partido "está preparado y no es la primera vez que se gobierna en minoría" en el Ayuntamiento. "Lo importante es la ciudad, lo importante es el proyecto, lo importante son los burgaleses y en eso está también volcado el Partido Popular".

Suárez ha participado esta manaña en una jornada organizada por el PP sobre el transporte en la provincia, en la que han estado presentes numerosos alcades y en la que se ha abordado la situación que crearía la nueva Ley de Movilidad Sostenible impulsada por el Gobierno Sánchez, que dejaría sin transporte regular de pasajeros a buena parte de la provincia, principalmente a la zona norte. El PP cifra en 78 paradas las que se suprimirían en Burgos, lo que afecta a una población de 25.000 personas, el 20% de la población rural en la provincia.

En el encuentro con los alcaldes, el portavoz del PP en la Comisión de Transportes del Congreso, Héctor Palencia, aseguró que la intención de su partido es "blindar" la Ley de Movilidad Sostenible "para que ninguna parada se quede sin atender, porque el Gobierno lo que pretende es endosársela a un tercero y no garantizar que ese servicio se preste". El PP aboga por el diálogo con las comunidades autónomas y las entidades locales que conocen el territorio y las singularidades de la vida diaria de los ciudadanos. Asimismo, aboga por un marco de financiación "que asegure que esas paradas continúen en el tiempo".

El PP anuncia en este sentido que va a movilizar a todos los ayuntamientos y diputaciones provinciales de España, de Castilla y León y también de Burgos, para que en cada territorio se posicione ante "este hachazo a la vida diaria de los burgaleses, de los castellanos y leoneses y de los españoles".

El consejero de Transportes de la Junta de Castilla y León, José Luis Sánchez, cifró en 474 paradas y en 370 municipios los municipios afectados en la región. "La accesibilidad, la conectividad de las zonas rurales, de las zonas más despobladas, de las zonas que tienen más difícil acceder a los servicios públicos, no puede reducirse a un problema estrictamente económico, sino que tiene que considerarse como un problema social". La Junta ha solicitado la convocatoria de una conferencia de transportes para abordar una problemática que afecta a varias comunidades autónomas.