A seis meses vista de unas nuevas elecciones municipales, el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Burgos, formado por PSOE y Cs, remata la elaboración de las últimas cuentas que presentarán antes de la cita con las urnas. El Presupuesto, que se prevé aprobar de manera inicial antes de final de año, está cimentado en la llegada de los Fondos Next Generation procedentes de Bruselas. En términos generales, el montante se eleva un 8,6% en comparación con el presentado hace doce meses hasta los 220,5 millones de euros.

El incremento de 17,5 millones se justifica principalmente gracias al montante que se inyectará desde Bruselas. Serán 11,2 los millones que se transferirán desde la Unión Europea, pero que apenas dejan la puerta abierta a nuevos proyectos para la ciudad ya que la mayoría de los gastos están comprometidos con inversiones plurianuales. La cultura y la promoción de la ciudad de Burgos a todos los niveles, que vieron reducido su peso en las cuentas municipales tras el estallido de la pandemia, vuelven de nuevo a reconquistar su espacio. La continuidad, como ya marcaron las cuentas presentadas en noviembre del 2021, es la tónica dominante.

Sin rastro de la remodelación de la calle Vitoria ni la del polideportivo de San Pedro y San Felices, uno de los puntos fuertes del bipartito será la rehabilitación de distintas calles. También se prestará especial atención a la reforma de la sede de la Policía Local, a mejoras en los Bomberos o a la adquisición de nuevos autobuses.

(Más información, en la edición de papel de hoy de Diario de Burgos)