Doce pueblos de la provincia han aumentado sus habitantes gracias al proyecto Burgos Repuebla Territorio Smart, que ha permitido el asentamiento de 77 nuevas personas de 22 familias diferentes. Esa es una de las conclusiones de este plan «exitoso» que la mañana de este jueves se ha cerrado con la exposición de sus conclusiones en el Monasterio de San Agustín de la capital. 

Subvencionado por el Ministerio para el Reto Demográfico con 280.000 de los 327.000 euros de presupuesto total, ha sido desarrollado por la Diputación, que satisfecha con los resultados, en palabras de su vicepresidente Ramiro Ibáñez, está barajando la posibilidad de darle continuidad en el futuro. «Hay ganas de seguir trabajando en esta línea. Tenemos ya experiencia y queremos aprovechar lo aprendido y las sinergias iniciadas», ha dicho.

Este programa, «que ha permitido valorizar lo interesante que puede suponer la vida en un pueblo y las oportunidades que estos brindan», ha servido para acompañar durante este año, de la mano del Proyecto Arraigo, a estos nuevos pobladores, «ayudándoles a buscar trabajo y vivienda», ha comentado Ibáñez, que ha destacado que ellos han traído «talento, emprendimiento y aire fresco a los pueblos». De los 77 asentados, 32 son  menores.