La alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala, ha reconocido hoy que será «complejo» suprimir el régimen sancionador de la ordenanza de terrazas como previo paso a la modificación de esa normativa. Admitió que el secretario general del Ayuntamiento mostró sus reticencias el lunes pero, al mismo tiempo, advirtió de que hay distintas opiniones en el seno del Consistorio, por lo que no desecha que se pueda tomar esa medida.
Ayala ha comparecido en rueda de prensa para anunciar la proposición que presentará en el Pleno del viernes. Por un lado, pedirá apoyo para la supresión de las multas y, alternativamente, para iniciar el trámite para el cambio de la ordenanza. En su opinión, se trata de una norma «demasiado restrictiva» para los hosteleros en cuanto a la colocación de veladores; «más compleja de hacer cumplir, por la cantidad de documentación que hay que revisar para otorgar las autorizaciones, y con «sanciones desproporcionadas». Es por estas tres razones por la que pretende impulsar la modificación.