La trascendencia de la decisión ha llevado a los tres grupos con representación en el Ayuntamiento, el PP, Vox y PSOE, a escenificar su unión en la disolución de los consorcios que en su día permitieron quitar las vías del tren del centro de la ciudad y ampliar el polígono industrial de Villalonquéjar y que dos décadas después no tienen ya razón de ser. La alcaldesa, Cristina Ayala, ha comparecido a mediodía junto a su socio de Gobierno y vicealcalde, Fernando Martínez-Acitores, y el portavoz de la oposición, Daniel de la Rosa, para dar cuenta del acuerdo adoptado en la Comisión de Hacienda. La decisión se ratificará en el Pleno que se celebra este viernes. 

Posteriormente, se convocarán los consejos de administración de ambos consorcios para aprobar la disolución. Será el primer paso, dado que posteriormente los activos (terrenos) y pasivos (deudas), 204 millones, pasarán a ser del Ayuntamiento y los tendrá que escriturar ante notario. Una vez que se haya dado este paso, el Ayuntamiento amortizará 30 millones de deuda y procederá a negociar con los bancos la reestructuración de la deuda para abonar menos intereses. 

Todos los grupos han coincidido en que se trata de una decisión muy trascendente para la ciudad, de ahí la necesidad de mostrar su unión. La alcaldesa ha agradecido a los funcionarios su colaboración y también a la Fundación Caja de Burgos. La gestión pasará a manos de la Sociedad de Promoción (Probur) que contratará a dos personas.