La construcción del tramo de la A-73 entre Quintanaortuño y Montorio muestra sobre el terreno los avances conseguidos desde el inicio de la actividad en agosto de 2023, si bien queda mucho tajo por delante. Una vez consumido un tercio del plazo de ejecución -establecido de 36 meses- los números oficiales compartidos por el Ministerio de Transportes están hoy alejados de las previsiones iniciales establecidas a estas alturas del proyecto.
La entrada en servicio de este segmento está programada para el otoño de 2026 y el tiempo corre deprisa. La unión temporal de empresas formada por FCC Construcción y Construcciones y Obras Llorente fue la ganadora del proceso de licitación y la conclusión hasta el momento es que los trabajos «avanzan favorablemente». Así define el Ministerio el estado actual de las labores en la respuesta a la pregunta realizada en el Congreso por los diputados socialistas por Burgos Esther Peña y Álvaro Morales.
Como ya es habitual en las inversiones relacionadas con la construcción de infraestructuras públicas, Transportes evita fijar plazos concretos o marcar horizontes temporales aproximados más allá de los plazos de ejecución establecidos en las adjudicaciones. De hecho, el Gobierno se limita a subrayar en su escrito que «se trabaja con intensidad» para acabar los trabajos «lo antes posible».
Más allá de los circunloquios y de la tibieza institucional, el documento de esta iniciativa parlamentaria especifica que el tramo lleva certificados 14,4 de los 108,2 millones de euros con IVA por los que fue adjudicada la obra para ejecutar este segmento de 11,5 kilómetros de la futura vía hasta Aguilar de Campoo.
Ello supone un 13,3% del presupuesto total, un porcentaje menor tomando como referencia los objetivos marcados inicialmente en la distribución presupuestaria. Aunque la cifra que afecta a las certificaciones no tiene por qué corresponderse con la ejecución real completada -que puede ser sensiblemente mayor-, la cifra anunciada después de 15 meses de actividad no alcanza para seguir el ritmo previsto.
El calendario del proyecto estableció para el último cuatrimestre de 2023, según su presupuesto base de licitación de 126 millones de euros posteriormente reducido, una inversión de 4,5 millones con IVA. Mientras, para 2024 el montante fijado era desde 37,4 millones de euros. Sin embargo, las certificaciones confirmadas por el Ministerio no llegan en este momento a los 15 millones de euros, a la espera de la actualización de los trabajos ejecutados y de los avances hasta el cierre del ejercicio.
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