Una estancia erasmus inolvidable

C.M. / Burgos
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Ocho alumnos de las diferentes sedes del programa Interuniversitario de la Experiencia de la UBU dirigido a mayores de 50 años viajan a la Universidad Jyväskylä de Finlandia

María Luisa Sevilla, Marco Aurelino Miguel y María Haydee junto a los profesores Félix Valbuena y Sergio Pérez y la estudiante de máster Alba González. - Foto: Valdivielso

No pueden poner ni un pero a la semana que han vivido en un país muy diferente al nuestro, Finlandia, donde han realizado una estancia Erasmus en la Universidad de Jyväskylä. María Luisa Sevilla, María Haydee, Elena Arroyo, Luis Antonio Pastor, Marco Aurelio Miguel, María Lourdes Pérez, Fernando Ortega y Félix Baños son alumnos del Programa Interuniversitario de la Experiencia de las sedes de Burgos, Aranda, Villarcayo, Miranda y Aranda, que coordina la Universidad de Burgos y que financia la Junta. 

Reconocen que iban un poco nerviosos, sobre todo por el idioma, pero junto a ellos viajaron los profesores Sergio Pérez y Félix Valbuena y la alumna del Máster de la Abogacía, Alba González, que siempre estuvieron a su lado para echarles una mano. María Luisa Sevilla, de 73 años, no dudó ni un minuto cuando le ofrecieron esta posibilidad. «Me encantó la Universidad en la que estuvimos. Ha sido una experiencia que no podré olvidar nunca».

El grupo de alumnos tuvo la posibilidad de conocer las acciones formativas que se ofrecen para los adultos en ese país, aunque son muy diferentes al Programa Interuniversitario de la Experiencia, dado que están más pensadas para que los mayores no se sientan solos que para que se formen. «Nos hemos sentido muy bien. Tuvimos la ocasión de poder explicar lo hacíamos aquí y se quedaron sorprendidos», asegura Marco Aurelio Miguel, de 68 años, que no dio crédito cuando fueron recibidos por la secretaria de general de Educación de Adultos de Finlandia. 

Imagen del todo el grupo que viajó a Finlandia. Imagen del todo el grupo que viajó a Finlandia. - Foto: DB

El grupo asegura que pudo comprobar las dos caras de este país, la social y la educativa. En Helsinki se reunieron con organizaciones no gubernamentales que trabajan en la atención a los mayores para que no se sientan solos. «Los impuestos son altos y los jubilados tienen problemas económicos. Intentan que estén activos».

María Haydee, de 74 años, asegura que Filandia no es un país «tan feliz» como aparenta. A pesar de que su nivel educativo es muy avanzado hay problemas de soledad y estrés. «Nos sorprendió mucho no solo la enseñanza reglada sino la importancia que dan a las nuevas tecnologías. Hay ordenadores públicos, incluso en 3D, en cualquier lugar para que puedas trabajar o imprimir». 

Los profesores que acompañaron al grupo, Félix Balbuena y Sergio Pérez, pudieron constatar el elevado nivel educativo que ofrece la UBU a los adultos. La directora del programa de la Universidad de la Experiencia, Gemma Miguel, puso en valor esta estancia internacional.