Barbadillo del Mercado lanza un grito de alarma ante la situación que presenta desde hace dos días el Arlanza, que ya por Salas de los Infantes baja sin apenas caudal y que llega a la siguiente localidad prácticamente seco. El alcalde,José AntonioSancho, se hace eco de las quejas de muchos vecinos y asegura que ni los más mayores de la zona recuerdan una situación así, por lo que demanda a la Confederación Hidrográfica delDuero una actuación urgente antes de que los peces y cangrejos del río perezcan por falta de oxígeno.
Las imágenes del cauce convertido en un auténtico pedregal, sin más reflejo líquido que algunos charcos, hablan por sí solas de una situación extremadamente grave.El regidor de Barbadillo delMercado contactó ayer con la CHD tras recibir el aviso de varios residentes en la localidad. Según explica, los técnicos aseguran que de Castrovido salen 120 litros por segundo pero que a Salas de los Infantes solo llegan unos 30, sin que sepan explicar los motivos de una merma tan alarmante del caudal. O bien se están produciendo filtraciones o bien un exceso de riego u otros abusos fuera de control, especulan en Barbadillo.
En cualquier caso, nadie acierta a comprender cómo la presa de cola del embalse está totalmente llena y unos kilómetros aguas abajo se deja morir al río.Sancho ha pedido a la CHD que desembalse algo de ese gran lago artificial para que al menos se pueda mantener la fauna del Arlanza. Su reclamación no parece haber sido acogida de buen grado en el organismo de cuenta, donde según explica no se muestran proclives a realizar modificaciones, ya que por un lado tratan de que se desarrolle un nuevo ecosistema fluvial y por otro quieren mantener el volumen suficiente para permitir que carguen los hidroaviones y helicópteros en caso de incendio.
Ni el alcalde, ni muchos vecinos de Barbadillo delMercado entienden que la presa de cola esté hasta los topes, con unos 3 hectómetros de agua, pero no se emplee para combatir la sequía actual y la principal no funcione. Ni siquiera existe una fecha de reanudación de las labores de puesta en carga -que requieren llenar y vaciar varias veces el cuerpo principal del embalse hasta comprobar que todo funciona correctamente- y los actuales trabajos para el sellado del sumidero se prolongarán al menos hasta el primer trimestre de 2024. «No es que sea una obra urgente, sino que es urgentísima», recalca el alcalde.
Al menos, a los de Barbadillo del Mercado les queda el consuelo de contar con otro río, un auténtico balón de oxígeno en la zona. «Cuando el Pedroso falle, mal está la humanidad», concluye José Antonio Sancho.