Continúa el movimiento en Peñaranda de Duero. Desde la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte de la Junta de Castilla y León detallan que los bienes con relevancia histórica que se encontraban en las zonas exteriores del Palacio de Avellaneda, la joya renacentista de la localidad ribereña que se convertirá en hotel de lujo y balneario, se han trasladado al Museo de Burgos. Entre esos bienes se hallan restos de capiteles y columnas.

Asimismo, indican que la Consejería sigue trabajando en la salida del mobiliario de instalaciones como el antiguo centro de formación, la cocina o los dormitorios, "si bien una gran parte del mismo ya ha sido entregado a centros de la propia Administración regional". Entre ellos, figura el Instituto de la Juventud, la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, además de entidades locales "que se han interesado por ellos", como precisan a este respecto. En líneas generales, desde Cultura explican que dentro del Palacio de Avellaneda, cuyo uso privativo se ha cedido a Castilla Termal por 50 años, "existe una gran variedad de bienes que van desde los útiles de uso cotidiano de las instalaciones, como mesas, sillas o menaje de cocina, a los bienes que se encuentran amueblando la zona noble, que es objeto de visita".

Precisamente, el alcalde de Peñaranda de Duero, Fernando Rioja, apunta que continúan realizando visitas turísticas al también conocido como Palacio de los Condes de Miranda, aunque desconoce hasta cuándo podrán hacerlo. "Me gustaría aguantar lo máximo y que pueda incluirse el verano, pero dependerá de cómo vaya la gestión de la licencia".

Tal como se ha detallado hasta ahora, la empresa tiene previsto invertir unos 15 millones de euros en un proyecto que creará en torno a 70 empleos. El establecimiento será un hotel con categoría de cinco estrellas y se espera que aporte un notable revulsivo para la oferta turística de Peñaranda.