Dos de los jugadores que a lo largo de la temporada han sido fijos en cada una de las alineaciones de Jon Pérez Bolo, entrenador del Burgos CF, no estarán enSanto Domingo para enfrentarse al Alcorcón el próximo domingo. José Antonio Caro, único integrante de la plantilla que había jugado todos los minutos en la competición liguera, vio la quinta amarilla del curso y será sancionado por Competición, mientras que la que vio su compañero Matos fue la décima, que también acarrea castigo.

Ambos han estado a un gran nivel a lo largo del curso y han sido protagonistas durante muchos encuentros. Matos comenzó los dos últimos duelos ligueros en el banquillo, según Bolo por decisión técnica. A nadie se les escapa que al ser el único lateral izquierdo de la plantilla son muchos los minutos y los kilómetros que ha acumulado en sus piernas y que le han hecho llegar justo de gasolina a este final de campaña.

Con la ausencia de ambos, Loïc Badiashile tendrá la ocasión de jugar su primer partido en el campeonato liguero después de haber sido titular en los tres encuentros de Copa y jugar ante el Hércules, el Arenteiro y el Real Mallorca. Supondrá el debut del francés en Segunda División, ya que aún no había tenido la oportunidad de disputar minutos en la división de plata.

Para suplir la ausencia de José Matos, todo indica que Anderson Arroyo comenzará por tercer partido consecutivo en el lateral izquierdo, mientras que a Borja se le espera en el derecho. Existen otras opciones como las de Ander Martín, aunque todo apunta a que Bolo apostará por mantener la defensa que ha actuado en los dos últimos encuentros ligueros.

Los que pueden tener su posibilidad de aumentar sus minutos en la Liga Hypermotion son Lucas Ricoy y Saúl del Cerro. Una vez que el filial ha concluido su temporada han pasado a formar parte de la primera plantilla y han completado la convocatoria blanquinegra los tres últimos encuentros. En un choque en el que no hay mucho en juego, ante un rival ya descendido, Bolo puede dar una oportunidad a los jóvenes futbolistas a lo largo de la contienda.

Y es que el Burgos echará el telón en tierras madrileñas ante un oponente que regresará a la Primera RFEF. Fue uno de los equipos que logró el ascenso la pasada campaña y que después de una irregular trayectoria desciende. El relevo en el banquillo pareció dar otro aire a los alfareros, aunque su mejoría no le ha bastado para evitar uno de los últimos cuatro puestos de la tabla clasificatoria.