Los propietarios de inmuebles tienen el deber y la obligación de mantenerlos en perfecto estado de conservación pero no siempre cumplen. La inspección técnica de edificios (ITE) es el instrumento que utiliza el Ayuntamiento desde 2012 para exigir ese cumplimiento mediante un diagnóstico técnico, tanto del interior como del exterior, a aquellos que han superado los 40 años de antigüedad, al ser los que más patologías pueden presentar.
El área de Licencias va a reforzar próximamente su personal y uno de los cometidos será multar a los incumplidores ante el aumento de denuncias, más de medio centenar cada año, por el mal estado de conservación de los inmuebles, algunas de ellas terminan en declaración de ruina. En los dos últimos ejercicios hay un total de 14 expedientes abiertos a los que se sumarían los de años anteriores que todavía siguen sin resolverse por la inacción de sus dueños. «Se hacen requerimientos a los propietarios para que los arreglen pero si no actúan se les declara en ruina y tienen la obligación de tirar el edificio», indicó el concejal de Licencias, Ignacio Peña.
A lo largo de 2024 se han abierto, por ejemplo, expediente al bloque de la calle Emperador, 2 debido al riesgo de desprendimiento para los viandantes. También se ha iniciado de oficio otro por caída de mortero en la calle Carcedo, 15, donde ha sido necesaria la intervención de los bomberos, que han colocado un vallado de seguridad. Por el contrario, la declaración de ruina del edificio de viviendas de la calle Santa Clara 14-16 iniciada en enero ha culminado con su derribo, que se ha realizado estos días y en próximas fechas se levantará un inmueble nuevo.
En algunas ocasiones son particulares los que denuncian el mal estado de los edificios y en otras la alerta viene a través de la Policía Local o los Bomberos. Si los dueños no actúan es el Ayuntamiento el que lo hace de manera subsidiaria si hay riesgo para los viandantes o los edificios colindantes. Es el caso de la antigua fábrica de lejías El Cid, donde se acaba de convocar un concurso para el derribo de uno de los tres edificios pero ha quedado desierto.