Padre de la víctima: "Menuda justicia, la víctima siempre pierde"
Desde el entorno de la menor denunciante, la sentencia del TSJCyL caía como un mazazo. A pesar de su discretas y contadas apariciones públicas, el padre de la víctima no podía por menos que expresar su postura frente al posicionamiento de los tres magistrados de la sala. "Es indignante que reconozcan los hechos pero, por su inmadurez, les absuelvan" afirmó contundente para añadir, a continuación, que "luego que se denuncie, sí seguro", mostrando su malestar hacia el poco o nulo apoyo que viene denunciando que ha sentido su familia desde el inicio de este proceso judicial.

En medio de una oleada de indignación, el padre de la menor, que fue quien interpuso la denuncia contra los tres futbolistas en la Comisaría de la Policía Nacional de Aranda, lamentaba el resultado de la deliberación de los magistrados. "Para que creamos en la justicia, cuatro años a Lucho, tres a Viti y Raúl absuelto por ser inmaduros aunque sí creen los hechos", declaró justo antes de afirmar con todo su enfado que "así se trata a una menor víctima de violación en España", como forma de demostrar su rechazo hacia la última sentencia de este caso, que apunta a que no será la última porque la intención de la familia denunciante es que se presente recurso contra ella ante el Tribunal Supremo.

"Menuda justicia, la víctima siempre pierde", se lamentó, claramente dolido, insistiendo en el hecho reflejado en la sentencia de que "se reconocen los hechos, pero como son cortitos e inmaduros por no haberse sacado ni la ESO se le absuelve a uno y a los otros les rebajan la pena", afirmó resumiendo desde su punto de vista los detalles que más le llamaron la atención de la postura del TSJCyL. 
Lo que no entiende el padre de la menor es que se escuden en su "inmadurez" para dictar esta sentencia "pero para irse fuera de su casa a vivir la vida, sacarse el carnet de conducir y estudiar para ser monitores deportivos, que van a estar con todo tipo de niños, niñas y mayores, si son maduros", concluía.

Olga Navarro, abogada de Raúl Calvo: "Es la primera batalla ganada"
Con optimismo contenido. Así recibía Olga Navarro, letrada de Raúl Calvo, la sentencia del TSJCyL tras los recursos interpuestos por las tres defensas del caso Arandina contra la firmada por los magistrados de la Audiencia Provincial de Burgos. "Estoy muy contenta porque, por fin, se ha hecho justicia", apuntó Navarro, sin dejar de mostrar su sorpresa porque tampoco se haya tenido en cuenta en esta instancia al conocido como cuarto jugador, insistiendo en que "es el único caso de este tipo de delitos con un testigo presencial y nadie lo tiene en cuenta".

La letrada defensora de Raúl Calvo ponía el acento a la hora de analizar esta última sentencia en la importancia que se le da a las "cuatro versiones de la menor", apuntando que "los cambios vienen cuando empieza a sentirse arrinconada", lo que considera que demuestra el "móvil espurio de la menor porque empezaba a sentirse discriminada".

Como punto clave para "dar la vuelta a la sentencia", Navarro apunta a lo que califica como una "incongruencia de la Audiencia Provincial" al destacar que la relación posterior con Raúl, después de lo que denunció que había sufrido en el salón, según los hechos considerados como probados por las sentencias, fuese consentida.

A todo ello, Navarro sumaba la consideración de inmadurez o cercanía en la edad de los tres acusados con la menor denunciante y se mostraba satisfecha porque "por fin" se hubiesen tenido en cuenta las pruebas periféricas a los hechos juzgados. "Esta es la primera batalla ganada", aseguraba, sin descartar que se puedan interponer nuevos recursos, por parte de las otras defensas, al mantener la versión de los tres acusados de que "allí no pasó nada". En este sentido, Navarro aludía a que "este tipo de casos nos tendría que llevar a reformar la figura de la responsabilidad de un o una menor ante una denuncia falsa", que no recoge nuestro ordenamiento jurídico. La abogada explicaba que, hasta que la sentencia no sea firme, no se puede pedir la indemnización por los tres meses que su defendido pasó en prisión preventiva.

Rafael Uriarte, abogado de Víctor Rodríguez: "La sentencia del TSJCyL es bastante más justa"
Dos de los tres exjugadores de la Arandina, Raúl Calvo y Víctor Rodríguez, Viti, se mostraron "emocionados" por el fallo del TSJCyL que absuelve al primero y y reduce la condena de 38 años de prisión a Viti y a Carlos Cuadrado, Lucho, a tres y cuatro años, respectivamente.

Rafael Uriarte, abogado de Calvo y de Viti, explicó a la Agencia EFE que sus representados están "emocionados" con la sentencia del Alto Tribunal, que es "bastante más justa" ya que han sido valoradas las pruebas aportadas por todas las partes.

Uriarte valoró así la sentencia del TSJCyL que, al contrario de la emitida por la Audiencia de Burgos, absuelve a Calvo y reduce la condena impuesta a Rodríguez y Lucho, de 38 años de prisión a tres y cuatro años, respectivamente, por entender que los hechos son constitutivos de un delito de abuso sexual, y no agresión a una menor, y apreciado como atenuantes la cercanía de edad y la proximidad en el grado de madurez con la víctima.

El abogado reconoció que están "más conformes con esta sentencia", asegurando que se nota que está hecha "por un profesional del Derecho" mientras que en la de la Audiencia Provincial de Burgos se dejaba notar la influencia de la presión social.

Uriarte destacó que se han tenido en cuenta las pruebas aportadas por ambas partes, valorándose la pericial de los teléfonos móviles o las pruebas de madurez de los futbolistas. Sin embargo, lamentó que apenas se haya incidido en la testifical del único testigo presencial de los hechos, un cuarto futbolista que estaba en la vivienda cuando sucedieron los hechos.
El letrado de la defensa no ha quiso pronunciarse aún sobre si recurrirán esta nueva sentencia ante el Tribunal Supremo, posponiendo esta decisión hasta que estudie en profundidad la nueva sentencia.

En este sentido, además, indicó que los plazos judiciales, por las especiales circunstancias que se viven en todo el país provocadas por el aislamiento a causa de la crisis sanitaria del Covid-19, no son tan rígidos, por lo que tendrán más tiempo para pensarlo.

Luis Antonio Calvo, abogado de la Asociación Clara Campoamor: "Es una vuelta atrás de 30 años"
La Asociación Clara Campoamor, personada como acción popular en el caso Arandina consideró este miércoles como una sentencia de hace 30 años la resolución del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) que absuelve a uno de los condenados a 38 años de cárcel y sentencia a 4 y 3 años a cada uno de los otros dos.

"Indignación" es la reacción que expresó a la Agencia EFE el letrado de esta asociación, Luis Antonio Calvo, para que el que, no solo el fallo, sino también el contenido de la sentencia, parece "una vuelta a treinta años atrás".

El abogado ha expresado la intención de recurrir la resolución de la Sala de lo Civil y Penal ya que, a su juicio, supone una sentencia contraria a la tendencia del Tribunal Supremo en casos de agresiones sexuales y representa un "desconocimiento" de los derechos de las mujeres.

Se trata de una sentencia en la que los magistrados han visto la perspectiva de los procesados, resumió Calvo.

El letrado de este colectivo feminista que ejerce la acusación popular en este proceso judicial hizo estas manifestaciones una vez que este miércoles se ha hecho pública la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León tras los recursos planteados por las defensas de los procesados a la resolución de la Audiencia de Burgos que condenó a cada uno de los tres exjugadores de la Arandina Club de Fútbol juzgados a 38 años de prisión por agresión sexual.

La Sala del TSJCyL, formada por tres magistrados, ha excluido totalmente de responsabilidad al más joven de los exjugadores procesados, Raúl Calvo, y ha condenado a Carlos Cuadrado ‘Lucho’ a cuatro años de cárcel y a Víctor Rodríguez ‘Viti’ a tres años, además de establecer el pago de una indemnización de forma conjunta y solidaria a la menor afectada con la suma de 10.000 euros.

El Tribunal ha calificado los hechos como un delito de abuso sexual, en lugar de agresión sexual, y ha apreciado como circunstancias atenuantes la cercanía de edad y la proximidad en el grado de madurez con la víctima, eliminando el condicionante de la intimidación ambiental, según fuentes del Tribunal Superior.