La Unidad de Reconstrucción de Accidentes de la Policía Local sigue estudiando el espectacular accidente acontecido el pasado 12 de mayo en la avenida de Cantabria en el que resultaron heridas seis personas, una de ellas terminó falleciendo días después. Los investigadores terminarán el informe en unos días y en él tratarán de explicar lo sucedido. El atestado girará, principalmente, en torno a la declaración del conductor del vehículo que causó el brutal impacto, el cual aseguró que instantes antes sufrió un desvanecimiento.
Fuentes del cuerpo municipal señalan que esta es la principal hipótesis en base a su declaración, si bien destacan que cuando llegaron las primeras dotaciones este hombre se encontraba ya consciente. En la prueba a la que se sometió minutos después dio negativo en alcohol y drogas.
Según las pesquisas policiales, el vehículo en el que circulaba chocó contra un BMW que se encontraba detenido en el carril derecho del semáforo de la avenida de Cantabria en el cruce con Reyes Católicos, en sentido Santander.
Según relataron testigos presenciales a este periódico, en declaraciones muy similares a las que recogió la Policía Local, el impacto fue «tan fuerte» y tan repentino, que provocó que el vehículo alcanzado por detrás se desplazara varios metros hacia delante y se empotrara en uno de los plátanos de la acera, entre el paso de peatones y el carril bici.
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