La delegada del Gobierno, Virginia Barcones, anunció hoy en Villagonzalo Pedernales (Burgos) un incremento en el número de controles para recordar que en estas fechas de reuniones "la única tasa segura es 0,0%". Lo hizo durante la presentación de la campaña especial de control de la Dirección General de Tráfico para prevenir la presencia del alcohol y drogas al volante, que se desarrolla desde hoy y hasta el próximo domingo, 17 de diciembre.
Se trata de días previos a la Navidad en los que se celebran gran número de reuniones con familiares y amigos, en las que el alcohol suele estar presente, a veces mezclado con otras sustancias. En ocasiones, después de haber ingerido unas y otras, o ambas, algunas personas se ponen al volante "obviando el peligro que implica para ellos, para los que viajan con ellos o para otros usuarios de la vía", señaló.
Barcones estuvo acompañada en la presentación de esta campaña por el subdelegado del Gobierno en Burgos, Pedro de la Fuente; la coordinadora autonómica de la DGT, Inmaculada Matías, y el teniente coronel jefe del Sector de Tráfico de la Guardia Civil en Castilla y León, Francisco Iturralde.
Para concienciar y evitar el riesgo, agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil (ATGC), así como de las policías locales de los ayuntamientos que se han sumado a la campaña, establecerán diferentes puntos de control en todo tipo de carreteras, así como en los cascos urbanos, y a cualquier hora del día, con el objetivo de evitar que personas que hayan ingerido alcohol o consumido drogas conduzcan.
El consumo de alcohol en Castilla y León es, apuntó, la tercera causa concurrente más frecuente en los siniestros mortales de tráfico por detrás de la distracción y la velocidad inadecuada y recordó que en 2023, el alcohol ha sido un factor concurrente en tres de los 105 siniestros mortales que han tenido lugar en vías interurbanas, lo que supone un 3 por ciento. En estos siniestros hubo cuatro víctimas mortales.
"El alcohol, dependiendo de su tasa, multiplica entre 2 y 15 el riesgo de sufrir un accidente de tráfico", recordó la delegada. Así, expuso que en Castilla y León, durante el año 2022, de los 121 siniestros mortales registrados en carretera, en 10 estuvo presente el alcohol como factor concurrente y hubo que lamentar 14 fallecidos.
Esto representa un 8 por ciento de los siniestros mortales totales (10 de 121) y un 10 por ciento de las víctimas mortales (14 de 136). En otras palabras, "uno de cada diez fallecidos en las carreteras durante 2022 tuvo como factor concurrente el alcohol. Uno de cada diez fallecidos podría haberse evitado si se hubiera evitado el consumo de alcohol", expresó Barcones. En 2023, de los 105 siniestros mortales que han tenido lugar en vías interurbanas, en 3 siniestros en Ávila, León y Valladolid, el factor concurrente fue el alcohol, lo que supone un 3 por ciento. En estos siniestros hubo que lamentar cuatro víctimas mortales.
El año pasado, esta campaña de control de alcohol y drogas en torno a fechas navideñas se desarrolló entre el 5 y 12 de diciembre. En Castilla y León se llevaron a cabo 15.376 pruebas de alcoholemia de las que 83 resultaron positivas, un 0,54 por ciento. Trasladado a Burgos, señaló que se realizaron 2.113 test y hubo siete positivos.
También se realizaron 196 pruebas de consumo de drogas de las que 78, casi un 40 por ciento, resultaron positivas. Es una cifra preocupante que está alejada del 23 por ciento de positivos que hubo durante la campaña realizada poco antes de la Navidad de 2021. En Burgos hubo seis pruebas y un positivo por consumo de drogas.
Llamamiento a los conductores. Barcones recordó igualmente que es un deber social "cumplir con las normas de seguridad vial para prevenir y evitar accidentes mortales de tráfico". "Por este motivo, hago un llamamiento a todos los conductores de Castilla y León para que no cojan el coche si han consumido alcohol o drogas ya que hacerlo es poner en peligro su vida y la de aquellos que les rodean", subrayó para pedir la colaboración ciudadana al respecto.
Finalmente, explicó la Operación Especial de Tráfico del Puente de la Constitución y la Inmaculada en la que se esperaba que 862.000 vehículos circulasen por las carreteras de Castilla y León se ha saldado con dos víctimas mortales. Especialmente trágico fue el balance en Soria, donde en apenas 20 horas se registraron cuatro víctimas mortales, aunque dos antes del inicio de la operación especial.