Dos semanas después del comienzo de curso, nuevos casos de covid-19 obligan a clausurar clases para evitar la propagación de la enfermedad. Este jueves, la Junta de Castilla y León ha informado del cierre de cinco aulas más en Burgos, lo que eleva a 37 el total de unidades afectadas en la provincia.
La medida adoptada por la Consejería de Educación afecta hoy a dos grupos más del centro concertado Sagrada Familia, de Miranda, que ayer ya cerró una clase, a otra aula del CEIP Raimundo de Miguel, en Belorado, y a dos más en Burgos capital, en el centro concertado internacional Campolara y en la escuela infantil Santa María La Mayor. El grupo en cuarentena del Campolara corresponde a Primaria y el resto a Infantil.
Los protocolos ante positivos confirmados por PCR en la comunidad educativa recomiendan poner en cuarentena a toda la clase cuando se trata de grupos de convivencia estable o 'burbuja', en los que los escolares no utilizan mascarilla en el aula ni se guarda la distancia de 1,5 metros entre alumnos.
A nivel nacional, el número de aulas cerradas por algún positivo supera las 2.800, una cifra que supone el 0,73% de los alrededor de 380.000 grupos que hay en el país. La ministra de Educación, Isabel Celaá, ha defendido que la situación no es "en absoluto caótica", como aseguran los sindicatos de trabajadores de la enseñanza, y ha avanzado que "de ninguna manera" contemplan un confinamiento total como el de marzo.