Cuando el sector del transporte aún está inmerso en el complicado desafío de encontrar conductores otro obstáculo, en este caso de índole fiscal, se interpone en su camino. La Comunidad autónoma de Navarra acaba de anunciar que a partir del año 2026 va a cobrar peaje a los camiones por circular por la A-1, por un tramo de no muchos kilómetros, pero que utilizan numerosos profesionales de la provincia a diario para salir a Francia y volver de Europa.
En torno a 300 camioneros burgaleses cruzan cada día la frontera gala a través de este paso de la antigua N-I, que se sitúa entre Olagazutía y el puerto de Echegárate, en el nudo de Alsasua. El peaje, cuya cuantía aún no ha sido determinada, «hará polvo» la economía de los camioneros autónomos y también supondrá un «un incremento de costes extra en el balance de las empresas». Las dos grandes asociaciones de transportistas de la provincia, Asebutra -pequeño autónomo- y Unibur -empresas- mostraban ayer su «hartazgo» por seguir siendo «el sector al que la Administración castiga año sí y año también».
Eusebio de Miguel, presidente de la segunda organización, lamentaba ayer «el abuso» que representan este tipo de medidas. Primero, porque son «discriminatorias, ya que solo pagan los transportistas, cuando de las carreteras y autovías hacen uso otros muchos vehículos». Y, segundo, «porque atenta contra el modo de vida de muchas personas que lo único que hacen es garantizar el suministro de bienes a la población». «Esto no se tiene nunca en cuenta: nos fríen a impuestos en los hidrocarburos, la legislación sobre descansos cambia cada dos por tres y cada vez es más restrictiva, con el inconveniente de que resulta muchas veces incomprensible para camioneros que no son de este país, porque los españoles ya no quieren trabajar en esto», se queja el presidente de Unibur.
De los descuentos no podrán beneficiarse los transportistas de la provincia
Su homólogo en Asebutra, Eduardo Rilova, subraya el «enfado» de los compañeros. Ayer mismo se puso en contacto con sus colegas en Navarra y éstos le comentaron que llevaban varios meses negociando con el Gobierno de esa Comunidad, que les había informado previamente de sus intenciones. Sin embargo, «sin esperárselo, la semana pasada anunciaron el establecimiento de los peajes sin contar con ellos y se sintieron traicionados». De hecho, no descartan movilizaciones y Asebutra se uniría a ellas «porque son muchos los camioneros burgaleses que se van a ver afectados por una medida claramente dañina para los intereses del sector». Como cada vez que se anuncia el cobro por circular por tramos de autovía, es cierto que se «aprueban descuentos, pero en este caso los únicos beneficiarios serán los transportistas navarros». «Nosotros tendremos que pagar el total», se queja. Igual que De Miguel, para Rilova «esta es una medida discriminatoria» que será recurrida ante los tribunales. «Pero mientras el procedimiento judicial no se resuelva, habrá que pagar», lamenta.
Ese tramo de la A-1 no es el único por el que va a cobrar Navarra. La Autovía del Norte, la A-1, tendrá el primer punto de cobro de peajes a camiones que va a implantar el Gobierno navarro a través de la empresa pública Nafarbide.
Esta sociedad ha previsto iniciar en 2026 la facturación de ese canon por uso de la carretera al tráfico pesado de mercancías que atraviese la A-1, e instalarlo después, de forma gradual, en las autovías de Sakana (A-10), la que va a San Sebastián (A-15) y la del Ebro (A-68), y en la N-121-A Pamplona-Behovia.
Los presupuestos de Nafarbide para el próximo año ya recogen el objetivo de licitar y adjudicar en 2025 la implantación de las instalaciones necesarias para acometer ese cobro del canon por uso a los camiones en la A-1 y el sistema de control y cobro y su implantación en la futura sede que tendrá Nafarbide.