La lluvia de los últimos días ha sido una bendición para todos los ciudadanos menos para los usuarios del aparcamiento subterráneo de la plaza de Santiago al haber confirmado la cronificación de las goteras en la parte central. La inversión de 1,75 millones no ha servido para solucionar el problema que obligó al Ayuntamiento por sentencia judicial a levantar la parte superior para arreglar la inferior. 

Seis meses después de recepcionarse la obra, el agua sigue cayendo de manera intensa y continúa en cuatro puntos de la parte central del estacionamiento sin que todavía se haya dado con la causa. En la tarde ayer en esas zonas se habían formando enormes charcos y los propietarios de las plazas se ven obligados a colocar plásticos y otros artilugios para que sus vehículos no se vean dañados. 

La empresa adjudicataria de la remodelación realizó hace varias semanas catas en diferentes puntos de la plaza en las que introdujo agua para comprobar el origen de las goteras pero todavía no ha remitido el informe al Ayuntamiento con las posibles soluciones. Los propietarios del estacionamiento están empezando a inquietarse y temen que la situación se dilate en el tiempo y caíga en el olvido. «Cuando llueve cae mucha agua. Daremos un tiempo prudencial y si no hay avances pediremos la ejecución de sentencia», indicó Celestino González (...).

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