Los establecimientos colaboradores del Ayuntamiento de Burgos para la recarga de las tarjetas del bonobús han recibido un correo de la empresa Prepay afirmando que el día 15 ya no prestará este servicio. De modo que solo se podrán recargar las tarjetas mediante el actual sistema hasta el día 14. A partir de ese momento, toda la responsabilidad recae en el Consistorio burgalés para garantizar que el sistema se siga prestando.

La portavoz del equipo de Gobierno, Andrea Ballesteros, ha asegurado que se está trabajando en una solución alternativa que pasaría por una gestión propia municipal a la espera de poder sacar un nuevo concurso, pero no ha concretado más detalles.

Preguntada por si en el caso de no encontrarse alternativa los autobuses serían gratuitos, Ballesteros ha confiado en encontrar una solución en los próximos días antes de llegar a este extremo a pesar de que hace cuatro meses que se sabe que la empresa que tiene adjudicada la gestión entró en concurso de acreedores. Antes de ello, se quedó con 850.000 euros de la recaudación, que serán de muy difícil cobro. 

Cabe recordar que la semana pasada el concejal de Movilidad, José Antonio López, avanzó la posibilidad de que las recargas se pudieran hacer por trabajadores del Ayuntamiento, aunque para ello se necesita disponer del software y los instrumentos que lo hagan posible, y anunció que posteriormente se convocaría un concurso para la gestión de la recarga a través de la página web o de una aplicación para móvil.

Desde las filas del PSOE han sido muy duras las críticas hacia el equipo de Gobierno. "Es una vergüenza, otra más de López. El Ayuntamiento de Burgos es el ridículo de España. ¿Quién está al volante?", se preguntó el concejal Josué Temiño.