El Burgos acumula ya ocho jornadas sin conocer la victoria en las que ha sumado dos puntos, algo que no le ocurría hace un tiempo. No obstante, el conjunto blanquinegro ha pasado por etapas complicadas en las que los resultados negativos se acumulaban. En la mayor parte de las ocasiones el equipo pudo reconducir la situación, aunque hubo otras en las que hubo tragedia y la escuadra blanquinegra acabó perdiendo la categoría. Lo positivo de esta campaña es que solo se han disputado 15 de las 42 jornadas de las que consta la Liga Hypermotion, por lo que existe.
También en Segunda División, aunque hace más de dos décadas, el Burgos de Enrique Martín estuvo once jornadas sin conocer el triunfo, aunque fue capaz de conseguir ocho empates, lo que minimizó la falta de victorias. Además en aquella campaña 01-02 el equipo había conseguido un importante colchón de puntos en el primer tercio de competición.
Para hablar de las anteriores rachas negativas hay que situarse en la Segunda B y en la campaña de Ramón María Calderé, la 13-14, el equipo acabó con una dinámica idéntica a la de ahora. En los últimos ocho partidos logró dos puntos. Incluso en el curso 15-16, con Ángel Viadero como máximo responsable deportivo, pocos se acordarán de que en la primera vuelta el Burgos estuvo siete jornadas sin ganar y sumó solo tres puntos. El combinado castellano acabó quinto y con un gran sabor de boca.
Más complicada fue la temporada 16-17 que comenzó Paco Fernández y que sacó un punto en los seis primeros partidos. Fue sustituido por Manix Mandiola y el primer triunfo llegó en la undécima jornada. El cuadro local fue a remolque toda la campaña y se salvó en un agónico play out ante el Linares.
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