El contrato más caro de cuantos tiene firmados el Ayuntamiento, el relativo a la recogida de residuos y limpieza viaria, lo será aún más. La Concejalía de Medio Ambiente tiene ya preparada la revisión de precios del contrato firmado en 2022 con Urbaser y, en contra de lo que inicialmente se pensaba, no se actualizará por los últimos dos años sino por cuatro (desde 2020). Esta nueva realizar exigirá un esfuerzo económico extraordinario ya que el Consistorio tendrá que pagar alrededor de 1,2 millones de euros más al año que en la actualidad. Es decir, la empresa que realiza este servicio pasará a percibir unos 17,2 millones.

La explicación a que la revisión de precios se vaya a realizar por cuatro años en lugar de por dos la explican en la Concejalía de Medio Ambiente en la Ley de Contratos del Sector Público. El Ayuntamiento da por bueno que la oferta que presentó Urbaser a mediados de 2020 se quedó  por debajo de los precios casi de manera inmediata y, aunque la adjudicación no se formalizó hasta abril de 2022, en el número 1 de la Plaza Mayor entienden que la actualización se debe realizar desde pasados tres meses desde que la empresa presentó su propuesta al concurso.

Lo que se ha tenido en cuenta en la revisión de precios ha sido el incremento del coste de la mano de obra, de los carburantes y del mantenimiento de la maquinaria.

En un porcentaje amplísimo, la revisión de precios que acepta el Ayuntamiento viene motivada por el incremento de los costes de personal, por lo que todo apunta a que Urbaser, está por ver de qué manera, tendrá que compartir o repercutir esa mejora en el contrato entre los profesionales de la empresa. Cabe recordar que en este momento se está negociando el convenio colectivo, que caducó el pasado 31 de diciembre.

En el comité son conocedores de esta revisión de precios ya que así se lo han traslado los responsables de la Concejalía de Medio Ambiente.

Una derivada de este encarecimiento del coste del servicio será que este gasto, al igual que otros que también se incrementan, deberá repercutirse a los ciudadanos a través de la tasa de basuras.

Cabe recordar que el Ayuntamiento no solo se enfrenta a un contrato de basuras que ha incrementado su coste y lo va a seguir haciendo, sino que también paga ahora casi cuatro veces más por los residuos que lleva al vertedero. A ello hay que sumar el millonario canon anual que va a tener que desembolsar a la Sociedad de Infraestructuras y Medio Ambiente (Somacyl) por la renovación total del Centro de Tratamiento de Residuos  (CTR) de Cortes.

La Ley de Residuos y Suelos Contaminados obliga a que la tasa, a partir de abril de 2025, cubra la totalidad del coste del servicio. Subirá. Falta por saber cuánto.