El HUBU paga 1M € por un programa parado 9 meses en 2 años

G.G.U. / Burgos
-

Sacyl insiste en que cirujanos de Valladolid colaboren en la implantación de válvulas aórticas y, a pesar de que no lo hacen, impide que apoyen los de León

Foto de archivo de la sala de Hemodinámica del HUBU, que depende de Cardiología y coloca las prótesis aórticas. - Foto: Valdivielso

El HUBU invirtió el año pasado 990.000 euros en la compra de unas prótesis que durante nueve de los últimos 24 meses no ha podido utilizar por una cuestión organizativa e interna de la Gerencia Regional de Salud (Sacyl), que se dilata sin solución: Burgos necesita de la colaboración de cirujanos cardíacos y desde Sacyl no solo insisten en que ese apoyo se dé desde Valladolid -a pesar de los constantes incumplimientos-, sino que se resisten a que lo hagan especialistas del hospital de León.

Las consecuencias de este problema interno de Sacyl, que como se explica más adelante no es casual, las sufren el HUBU y sus pacientes. En concreto, quienes necesitan una prótesis de la válvula aórtica y no pueden recibirla en una cirugía a corazón abierto por riesgo elevado de no sobrevivir. Es decir, necesitan que se la coloquen mediante un cateterismo; en un procedimiento más conocido como TAVI (por las siglas en inglés) y que el HUBU lleva años tratando de potenciar, a pesar de  las trabas. 

Este periódico tiene constancia de cuatro parones desde enero del 2023 que, en total, suman nueve meses de inactividad. Es decir, que durante más del 35% del tiempo no se ha podido citar pacientes ni utilizar ninguna de las prótesis compradas y las causas tienen origen -y solución- en Valladolid. Ese es, de hecho, el caso ahora: se retomó en octubre, pero desde finales de noviembre está parado otra vez.
Así, quienes tienen una condición clínica que desaconseja que les sustituyan la válvula enferma por otra artificial en un quirófano, tienen que desplazarse para beneficiarse de su única opción terapéutica: el TAVI. Se trata de un procedimiento no invasivo, sin anestesia general, en el que la prótesis se introduce mediante un catéter a través de la ingle y se lleva hasta el punto adecuado, donde se coloca el dispositivo biológico para que asuma la función del orgánico. 

La Administración exige que los hospitales en cuya cartera de servicios no se incluye la Cirugía cardíaca cuenten con un facultativo de esta especialidad cada vez que los cardiólogos hemodinamistas vayan a realizar estos procedimientos, a pesar de que el cirujano no interviene y que la salud del paciente tampoco le permite operarse. Y es aquí donde surgen los problemas del HUBU, que es el único gran hospital de la Comunidad sin Cirugía cardíaca: depende de otros.

Menos lista de espera. Para permitir que Hemodinámica del HUBU mantenga este programa y no tenga que derivar pacientes fuera para algo que les pueden hacer en su hospital, Sacyl lleva años tratando de estabilizar una colaboración entre los cirujanos cardíacos del Clínico de Valladolid y el complejo asistencial burgalés. Pero, a la vista del resultado, con poco éxito: los cirujanos del Clínico -que cobran por desplazarse a Burgos- dejan de acudir de repente y sin comunicación previa.

Dado que la situación es conocida, los cirujanos cardíacos de León se han ofrecido a colaborar de forma estable con el HUBU, pero Sacyl, de momento, no lo ha autorizado e insiste en que acudan desde Valladolid. Fuentes no oficiales explican que se debe a que los cirujanos cardíacos vallisoletanos tienen menos presión asistencial y menos lista de espera que los de León. Y en Sacyl entienden que, por tanto, tienen mejores condiciones para colaborar con Burgos.

Pero esta colaboración suele utilizarse como 'elemento negociador' con Sacyl y, al final, las consecuencias las pagan el HUBUy sus pacientes.

ARCHIVADO EN: HUBU, Sacyl, Burgos, Salud