Una vez asumido por todas las partes, ciudadanía incluida, que las fiestas de SanPedro y San Pablo se reducen a una semana, las fechas fijadas para celebrarse de aquí en adelante van del 27 de junio al 3 de julio, caiga como caiga en el calendario. Lo que variará cada año es la distribución de las actividades entre esos días, teniendo en cuenta cómo cae el festivo del 29 de junio y el fin de semana.

Para el estreno del nuevo San Pedro ya se ha establecido el reparto, al menos, de los actos tradicionales y el de la cabalgata, que como les adelantamos cambia de formato y pasa a celebrarse en horario nocturno. Pero además de que se desarrolle cuando haya caído el sol, el mayor reto a conseguir es abandonar las cuatro tediosas horas de las últimas ediciones y agilizar el ritmo para que aquello no se convierta en un desfile interminable. Con el nuevo formato ha de ser mucho más corta no solo por evitar el aburrimiento, sino también para no amanecer viendo desfilar carrozas y peñistas.

Dado que a finales de junio la puesta de sol es a las diez de la noche, el estreno de la nueva versión se realizará aún con cierta luz en el horizonte porque se ha establecido el inicio a las 21:30  horas. Pero empezar más tarde no sería operativo. Sobre todo porque la cabalgata no debe solaparse con los fuegos artificiales, de ahí que la intención sea reducir a dos horas máximo su duración porque a las once y media las miradas se desviarán del asfalto al cielo. En cuanto a la logística por el lanzamiento de los fuegos, no intercederá en el desarrollo de la cabalgata porque, como el año pasado, se lanzarán desde el puente Castilla.

Si con esa presión de los cohetes las agrupaciones se conciencian de que no pueden entretenerse durante el recorrido, miel sobre hojuelas. El reto está sobre la mesa. Con esa intención trabajan ya el Ayuntamiento y sobre todo la Hermandad de Peñas y la Federación de Blusas, que son quienes deberán transmitir la necesidad de evitar las paradas en el recorrido, los saludos y regalos a las reinas o cualquier otra distracción: «Estamos conformes con estos cambios. Nadie quiere sufrir cuatro horas de cabalgata. Pero es verdad que habrá que esperar a ver cómo sale todo», responde preguntado por esta cuestión Miguel Santamaría, presidente de la Federación de Fajas.

El resto de calendario es bastante intuitivo. El jueves 27, el día que empieza todo, tendrá lugar el pregón y a continuación el lanzamiento de la bota. Y para el sábado, que coincide con la festividad de San Pedro, se mantiene la ofrenda de flores. Aquí también buscarán agilizar o al menos adelantar un poco su horario para llegar a tiempo al baile de la jota en la Plaza Mayor.

El domingo 30 será el turno del pregón infantil y de la interpretación del Himno en la plaza del Rey San Fernando. Habrá cinco días de toros, del sábado al miércoles. Y para el domingo siguiente, fuera del calendario estricto de San Pedro, queda fijada la celebración del Día de las Peñas en Fuentes Blancas (sin el Burgalés Ausente). Este año es el 7 de julio.

En cuanto a la proclamación de las reinas, que como se venía haciendo se separa del programa, anoten el sábado 22 de junio. Antes habrá sido la elección, prevista para el 25 de abril.