La primera reunión entre la Consejería de Educación y los representantes sindicales del profesorado se cerró ayer con acuerdo y un saldo positivo para las plantillas jurídicas de Burgos del próximo curso escolar, aquellas que recogen las plazas de funcionario y que serán incluidas en el siguiente concurso de traslados. La negociación permitirá la creación de 48 puestos en Secundaria y nueve en distintas especialidades de Primaria, frente a los cinco inicialmente planteados por la Administración autonómica.
En un comunicado conjunto, las cinco organizaciones sindicales presentes en la mesa de diálogo (STECyL-i, CSIF, ANPE, UGT y CCOO) se mostraron, sin embargo, en desacuerdo con parte de los criterios que la Junta propone a la hora de sacar vacantes nuevas debido a que «no son consensuados» con las centrales de representación, si bien valoraron como «positivo» el balance final dado que no ha habido ninguna supresión y se ha beneficiado a la mayor parte de los cuerpos docentes. En este punto, precisaron que esta situación es fruto en gran parte del pacto alcanzado en enero de 2022 para reducir las ratios de alumnado en las aulas y la rebaja de horas lectivas de los profesores.
A pesar de todo, consideran que el colectivo de maestros no se ha visto tan favorecido en esta negociación debido a que «no se ha proporcionado este curso el cupo necesario para cubrir las horas resultantes de la aplicación de dicho acuerdo». «Si no se dota de este personal, no se puede crear más plantilla jurídica», explican los sindicatos. De igual forma, se detienen en la reiterada demanda de puestos en las especialidades de Pedagogía y Compensatoria, que ha quedado recogida en el acuerdo con seis vacantes, este número resulta insuficiente para estas centrales, que hacen referencia a las recomendaciones de la Unesco en este sentido y que marcan contar con un profesional en este campo por cada 250 estudiantes.