Burgos asume desde hace mucho tiempo que su integración en la red nacional de hidrogenoductos es una carrera a muy largo plazo en la que espera formar parte del grupo de cabeza algún día aún lejano. De momento se encuentra en una posición rezagada y resulta difícil vislumbrar un horizonte esperanzador porque las noticias negativas se suceden.

La provincia ya sabe que tendrá que esperar hasta la próxima década, en el mejor de los casos, para ser protagonista principal de los próximos movimientos estratégicos que aún están por definir.  Y, por si había alguna duda al respecto, el Gobierno de la nación ya avanza que no estudia en este momento ninguna planificación.

Eso no ocurrirá, al menos, hasta que no se tramite la nueva normativa nacional. Mientras se completa ese paso, Madrid cede toda la capacidad de decisión, de organización y de análisis a la compañía Enagás y se refugia en un maremágnum de directrices europeas relacionadas con el desarrollo del hidrógeno verde. «La planificación para el desarrollo de la red se debe elaborar atendiendo a las disposiciones europeas de aplicación, en concreto el Paquete de Gases Descarbonizados e Hidrógeno», recuerdan.

Una vez entre en vigor la legislación mencionada se podrán establecer nuevas previsiones. Así, solo llegado el caso, se diseñará un estudio «en el que podrán participar los agentes afectados con la intención de que recoja las necesidades de cada región».

Una declaración de intenciones difusa y nada concreta que se pierde en el espacio temporal a futuro porque «hasta la fecha no se han establecido los parámetros para el diseño de la red de hidrogenoductos, y por tanto, no se ha adoptado ninguna planificación».

Esa es la respuesta compartida por el Gobierno a la pregunta formulada por los senadores del Partido Popular por Burgos Javier Lacalle, Salvador de Foronda y Raquel González. La provincia, al igual que otros territorios del país que aspiran a entrar en la futura red del hidrógeno, tendrá que esperar a las siguientes planificaciones y en este escenario toda la atención se centra en los próximos anuncios de Enagás.

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