El actual equipo de Gobierno está comprometido con la accesibilidad universidad en todos los ámbitos. No solo ha reservado espacios para las personas con movilidad reducida en algunos de los actos festivos y culturales que se han desarrollado en la ciudad para garantizarles la visibilidad sino también ha introducido mejoras en el transporte público, tanto en los autobuses urbanos como en los taxis aumentando las licencias de vehículos adaptados. Ahora toca el turno a los aparcamientos reservados para este colectivo que hay en diferentes zonas de la ciudad.
El área de Movilidad trabaja ya en la elaboración de un plan para incrementar las plazas de aparcamiento para discapacitados ante la demanda de las asociaciones y colectivos que les representan o personas a título individual. «Es un compromiso real el que tenemos. Se irán reservando en función de las necesidades que se vean en cada vía y también en función de las peticiones que nos han llegado en este sentido», indicó el concejal de Movilidad, José Antonio López.
A la espera de concluir el plan, ya se ha decidido que se ganarán al menos una o dos en cada uno de los sentidos de la avenida de Reyes Católicos. Cuando se concluyó la construcción del carril bici segregado de la calzada ya se advirtió por parte de los vecinos que había escasez de plazas reservadas para discapacitados (una en 900 metros).
De hecho, la alcaldesa, Cristina Ayala, cuando inauguró la obra se comprometió a aumentar estas plazas, pero por ahora no se ha dado ningún paso. Otra de las posibles vías en las que se actuará es en la calle Ana Lopidana. «Son algunas de las zonas en las que nos han pedido más plazas», añadió el concejal.
Estos espacios tienen unas características determinadas para que los usuarios puedan abrir la puerta del vehículo con comodidad y no deben tener bordillo. Para poder estacionar en estas plazas es necesario obtener la correspondiente tarjeta de autorización que se otorga a las personas físicas que tengan reconocida oficialmente la condición de persona con discapacidad.
Este documento permite estacionar el vehículo en lugares adecuados sin limitación de tiempo y sin la obligación de obtener comprobante de los estacionamientos regulados, tal y como establece el Real Decreto 888/2022, de 18 de octubre, determinado por la Gerencia de Servicios Sociales.
La Policía Local ha redoblado la vigilancia ante la picaresca relacionada con el uso indebido de las tarjetas de estacionamiento reservadas a personas con movilidad reducida por parte de familiares de los titulares. La multa mínima en estos casos graves es de 3.000 euros y puede alcanzar los 60.000 y a veces llegan a los juzgados.