El Burgos CF se ha quedado solo. Ya es el único equipo de toda la Segunda División que no ha perdido en su feudo. Los blanquinegros han sumado 28 de los 36 puntos que ha habido en juego en los partidos de casa. Han logrado ocho victorias y cuatro empates, algo que no ha conseguido nadie. El domingo caía a manos del Racing de Ferrol el Sporting, que hasta la fecha tampoco había cedido en casa. El 1-2 que le endosó la escuadra gallega hizo del Burgos el líder en solitario de esta clasificación. 

El cuadro castellano ha llevado un paso más allá eso de hacer de su feudo un fortín. Jugar al abrigo de su afición hace que el éxito esté prácticamente garantizado. Solo Mirandés, Andorra, Real Zaragoza y Huesca han logrado un resultado positivo en su visita a la capital burgalesa.

Aseguran los protagonistas que esta racha no es una casualidad. La comunión que existe con la grada hace que el equipo siempre juegue con ventaja en casa. Los futbolistas insisten en cada una de sus intervenciones en que ese ánimo y ese empuje se nota en el campo. Tras el derbi regional ante el Real Valladolid el propio Jon Pérez Bolo, entrenador del equipo, incidía en la importancia de la afición.

El Plantío se ha convertido en territorio hostil para todos los visitantes. La marea blanquinegra es una pieza imprescindible para el equipo que se sienta arropado y pleno de confianza cada vez que pisa el césped del estadio municipal.

Los blanquinegros se tuvieron que aferrar a su campo cuando las cosas no les salían fuera de casa. En la primera parte de la temporada el cuadro local acumulaba derrotas como visitante, mientras, por otro lado, coleccionaba partidos brillantes en su feudo. Hubo dudas por el comportamiento del equipo a domicilio, aunque en muchas ocasiones quedaban disipadas cuando el escenario era El Plantío.

Más difícil todavía. El reto no era solo comenzar a puntuar fuera de casa, sino continuar con el nivel mostrado como local. Poco a poco el Burgos lo va consiguiendo. Ha logrado mantener el listón alto en casa y ha comenzado a funcionar con más regularidad fuera, pese a la última derrota en Leganés.

De esta forma se ha cumplido los vaticinios de los más optimistas que aseguraban que en cuento el conjunto blanquinegro enderezara su rumbo como visitante se acercaría al play off.

El Burgos se encuentra en un buen momento, convencido de que puede seguir mejorando y dando pasos hacia adelante. El paso de las jornadas le está sentando bien y su arma más poderosa es El Plantío.