Tras presentar el resultado el informe jurídico encargado por el Ayuntamiento sobre el asunto de la plaza de toros a todos los grupos municipales, la alcaldesa arandina, Raquel González, ha dejado clara su opinión sobre los siguientes pasos a dar. «A priori, mi planteamiento es que hemos intentado por activa y por pasiva llegar a acuerdos, el primer año nos desgastamos absolutamente en un esfuerzo para poder llegar a la legalización para otorgar la licencia, pero ya hemos visto que por parte del empresario no se han vuelto a dar pasos y a lo único que nos aboca es a tener que resolver el contrato», sentenció tajante la primer edil arandina.
A pesar de esta contundencia, González dejó la puerta abierta al debate interno del equipo de gobierno, una vez concluyan los festejos patronales, para acordar los pasos a seguir en este sentido y, por lo tanto, descartó de plano la opción de imponer multas a Toros Ricor en aras a obligarla a legalizar el inmueble y poderle otorgar la licencia definitiva.
De hecho, como ejemplo de los pies de plomo con los que la alcaldesa arandina se enfrenta a los asuntos relacionados con el coso taurino, González dejó ayer sobre la mesa sin firmar un decreto para otorgar una licencia de obra para el arreglo de la chapa de la cubierta de la plaza, con el fin de estudiar en profundidad las consecuencias de esta firma. «No voy a firmar nada de la plaza de toros que no tenga absolutamente claro que no va a conceder ni un solo beneficio a la empresa y ni suponer un solo perjuicio para el Ayuntamiento de Aranda», aseguró.
Malestar del PRCAL
La alcaldesa además aludió, a preguntas de los medios de comunicación, al enfado manifestado por el edil de Obras y portavoz del PRCAL, José Ignacio Díez, en la junta de portavoces convocada para entregar el informe jurídico sobre el coso. «El concejal de Obras manifestó su enfado o su molestia por la forma en la que había sido entregado el informe», afirmó González, para aclarar a renglón seguido que «el concejal de Festejos recogió el informe por pura situación de vecindad con el letrado firmante» a modo de explicación de las formas en las que el documento había llegado a la mesa de Alcaldía cuando se había solicitado desde la Concejalía de Obras y Urbanismo.
La otra línea de fuego a la que se ha enfrentado la alcaldesa es al enfado de las peñas, plasmado en el último comunicado conjunto. González se reconoció que tienen pendiente crear una comisión de Festejos, promesa incluida en su programa electoral, para poder trabajar de manera conjunta y aseguró haber dado órdenes al edil del área de crearla tras las fiestas patronales. «Como arandina, nada pretendo hacer en contra de las fiestas, y si hago algo más, pido disculpas», declaró. En cuanto a las críticas por la búsqueda de la declaración de Bien de Interés Cultural de las bodegas subterráneas, la alcaldesa aseguró que servirá para lograr subvenciones pero que no impedirá que se sigan usando como hasta ahora, siempre que se respete la normativa municipal en cuanto a sus arreglos y reformas.