El Ayuntamiento de Miranda decidió invertir hace casi un lustro más de 400.000 euros para levantar el Centro de Bienestar Animal en el polígono de Las Californias. Las obras terminaron en la primavera de 2021, pero aún no se ha podido abrir al público para aprovecharlo por completo, aunque ha estado disponible para acoger a las mascotas abandonadas desde el verano de 2022. Primero faltaba un reglamento sobre su uso y este curso se harán varias mejoras en la infraestructura. Es decir, los usuarios podrán entrar tres años después de que se construyera.
La concejala de Medioambiente, María Cueva, explica que «este año tiene que estar todo ejecutado» y confía en que se pueda habilitar de cara al inicio del curso escolar 2024-2025. Precisamente, apunta que en la actualidad el responsable del Centro se encarga de acudir «a los colegios y hacer charlas sobre los vertebrados y los mamíferos, hasta llegar a los animales domésticos, para educar sobre las mascotas». La edil reconoce que «aún no se ha decidido cómo organizar esos talleres en el futuro», sin embargo, teniendo en cuenta que se levantó para que fuera algo más que una perrera, cree que «lo ideal sería que se hicieran en el Centro».
Cuando Cueva tomó posesión como concejala rápidamente supo que el lugar necesitaba cambios antes de abrir. No obstante, elPresupuesto de 2023 olvidaba esa realidad e impidió que se ejecutaran.En cambio, en las cuentas presentadas para 2024 se han incluido 60.000 euros para estas mejoras. Por un lado, la concejala comenta que debe instalarse «una pantalla acústica en la parte trasera para evitar el estrés por ruido de los perros, que costará unos 30.000 euros, y el resto se utilizará para algunos arreglos en el interior».
La edil de IU-Podemos asegura que «en cuanto se disponga del dinero, se va a hacer todo» y adelanta que, al menos en el caso del interior, «la brigada municipal calcula que en un día y medio lo tendrían listo». El expediente de mejoras requeridas es bastante largo. A modo de ejemplo, Cueva describe que «en la zona de esparcimiento de los gatos hay vallas pero no hay techo, en algunos cheniles hay holgura y deben asegurarse, debe sembrarse la zona exterior, se quiere poner una valla para convertirlo en una zona de conocimiento entre los animales y los posibles adoptantes y hay que colocar una cortina en el aula de educación ambiental porque hay un proyector que no se puede usar sin ella».