Montse Tomé tildó ayer a la selección española femenina como "un equipazo". Y bien podría haber añadido la coletilla '... como una Catedral'. La de Burgos, por ejemplo. A cuyos pies posaban esta mañana las 23 internacionales -muchas de ellas vigentes campeonas del mundo- que esta tarde afrontan en El Plantío (19:00 horas) una cita histórica para la ciudad y para el estadio, que estará a rebosar ante la República Checa, ya que las entradas están agotadas.
La afición burgalesa brindó un gran recibimiento ayer al mediodía a la expedición española, que llegó a la capital, se alojó en el céntrico Hotel Palacio de los Blasones y por la tarde entrenó en el escenario del partido ante las checas. Será el segundo encuentro de clasificación para la próxima Eurocopa que dispute España tras arrollar el viernes a Bélgica en Lovaina (0-7).
Las vigentes campeonas del Mundial y de la Nations League se enfrentan a un rival que llega tras caer en la primera jornada contra Dinamarca (1-3), pero Montse Tomé no quiere que su equipo se confíe. La seleccionadora nacional no quiso desvelar el once que alineará esta noche y dejó abierta la posibilidad del debut de la portera mirandesa Adriana Nanclares, que entró en la lista por Cata Coll.